El presidente del Congreso de los Diputados, José Bono y su esposa, Ana Rodríguez, han anunciado su separación de mutuo acuerdo y de manera amistosa, según informó el propio José Bono. Las dos partes piden respeto a su intimidad y a la de sus hijos. Asimismo, será hoy cuando, tras 29 años de matrimonio, se formalice la separación con la presentación del escrito correspondiente en el juzgado de primera instancia de Toledo, ciudad en la que tienen su residencia el político y su esposa.

La última vez que se les vio juntos fue la semana pasada durante la boda de la hija del presidente de Iberdrola, Ignacio Galán. Nadie imaginó entonces que estaban al borde de la ruptura. Ayer mismo Bono hizo gala de su profesionalidad: impartió la conferencia Cristianismo, política y sociedad en los cursos de verano de la Universidad Complutense en El Escorial. Por supuesto, no hizo ninguna referencia a la noticia, ni tampoco se paró a la entrada o salida de la cita para responder a las preguntas de los periodistas, como es su costumbre.

Durante su discurso no hizo la más mínima alusión a la noticia, como tampoco quiso pararse a responder a la prensa ni a la entrada ni a la salida.

La pareja ya sufrió en 2006 una grave crisis matrimonial, en la que a Ana Rodríguez se le atribuyó un romance con un joyero cordobés, que nunca fue confirmado. Bono sí admitió en esa época que necesitaba dedicar más tiempo a su familia. De hecho, según contó él mismo, ésta fue la causa por la que presentó la dimisión como ministro de Defensa del Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero.

José Bono y Ana Rodríguez han sido en los últimos tiempos una pareja habitual de la crónica social. En los próximos meses van a ser abuelos por segunda vez; su hija Ana y su esposo Manuel Martos, hijo de Raphael y Natalia Figueroa, están esperando su segundo hijo.

La separación –aún no se sabe si hablamos de divorcio– va a dar mucho que hablar y rumorear. La periodista especializada en cuore María Eugenia Yagüe escribió esto ayer en Mi agenda secreta: «Ahora aseguran que el implante que eliminó la calvicie de Bono habría sido un gesto de coquetería porque quería gustar a alguien en concreto. Que su nueva imagen, más juvenil y moderna, se debe a que está enamorado».