La crisis económica aprieta y ahoga. No sólo a quienes no pueden pagar sus hipotecas o sus deudas a final de mes, sino también a los encargados de mediar en los conflictos que se dan entre los ciudadanos. Según datos del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA), el trabajo de los jueces creció de forma espectacular en los seis primeros meses del año: la falta de dinero ha hecho que se dispare la conflictividad en la provincia.

El crecimiento, por cierto, se da en todas las jurisdicciones, aunque en las más relacionadas con la resolución de conflictos económicos la subida es más acusada. En la jurisdicción Civil, donde se resuelven, por ejemplo, las reclamaciones de cantidad, los impagos de hipotecas y los procedimientos concursales de las empresas, el incremento del número de asuntos sin resolver en los seis primeros meses del año se sitúa por encima del 30% (55.305) si se comparan estos datos con los obtenidos durante el mismo periodo del ejercicio anterior.

Dentro de este área, los juzgados de Primera Instancia tenían hasta junio un 30% más de casos sin resolver que en el primer semestre de 2008. Los dos juzgados Mercantiles sufren también situaciones de difícil calificación. Por ejemplo, la cifra de asuntos ingresados en los seis primeros meses de 2009 es un 270% superior a la del pasado año; se ha resuelto el 178% de los casos y los jueces tienen que decidir sobre 1.479 procedimientos vivos (un 88,17% más).

Ya explicó recientemente el juez decano, José María Páez, que "la radiografía de la Justicia en Málaga es la de un enfermo muy grave", dado que, a la tradicional falta de medios humanos y materiales, se ha sumado el "brutal" incremento de trabajo provocado por la crisis.

En la jurisdicción Penal los datos del primer semestre tampoco dejan lugar a dudas si se analizan por órganos, aunque el global mejora si se mide a la totalidad de los juzgados. Así, el número de asuntos en trámite hasta junio en los órganos de lo Penal era de 5.540, casi un 50% más que en el mismo periodo de 2008. Si a esta cifra se le suman los guarismos aportados por los juzgados de Violencia de Género, de Instrucción, de Primera Instancia e Instrucción (en los pueblos son órganos mixtos), los de Menores, el de Vigilancia Penitenciaria y las secciones de la Audiencia, el aumento interanual de procesos sin resolver se sitúa en el 6,3%.

Llama también la atención la subida experimentada en la jurisdicción Social, cuyos magistrados se encargan de conocer los conflictos entre empresas y empleados. Así, en estos órganos entraron un 43% más de asuntos hasta junio (11.485). Algunas áreas están en riesgo de colapso si las administraciones autonómica y central no ponen los medios adecuados, tal y como reconoció el decano en declaraciones recientes: "Yo siempre digo que en estas circunstancias es muy difícil centrarse en una jurisdicción en concreto, porque en todas hay problemas. Sería injusto decir que hay áreas en la que la situación es óptima. Eso no ocurre". En la jurisdicción Contencioso-Administrativa las causas en trámite hasta junio crecieron un 19 por ciento.