El presidente provincial del PP, Elías Bendodo, recibió ayer el rendido apoyo de las altas instancias de su partido a nivel andaluz y nacional. Tanto Mariano Rajoy como Javier Arenas participaron en un almuerzo navideño con 1.500 militantes del PP en Málaga y representantes de diversas entidades de la provincia. Toda una prueba de fuerza del partido en la provincia que además fue bien recibida por Rajoy. Su intervención fue todo un aplauso público a la gestión de Bendodo, al destacar que fue la segunda provincia en mayor crecimiento de votos del PP en los comicios europeos. Un dato que sirvió al presidente nacional de los populares para poner el trabajo de su partido en Málaga como ejemplo para ganar las próximas elecciones andaluzas y nacionales: "Estamos muy orgullosos, contentos y satisfechos, y esa es la línea".

Arenas no se quedó atrás, ya que puso a Málaga como "cabeza del cambio y motor en Andalucía" del vuelco al que aspira en las elecciones para aspirar a la presidencia de la Junta. De hecho, anunció que el próximo 7 de enero "abriremos el curso político en la sede que hemos abierto en la Carretera de Cádiz".

Repaso a la actualidad. Los discursos no sólo rondaron alrededor de las perspectivas electorales o la gestión política en Málaga. La actualidad tuvo una parte importante del protagonismo de las intervenciones, en especial por parte de Mariano Rajoy y Javier Arenas.

La votación para iniciar la prohibición de los toros en Cataluña, la deuda histórica y el caso de Aminatu Haidar fueron tres de los aspectos que abordó el presidente nacional del PP, ya en el papel de jefe de la oposición. Fue especialmente duro al referirse a la política exterior al hilo de la situación de la activista saharaui, en lo que calificó como una "chapuza" por parte del Gobierno y de la derrota total de España a costa del triunfo diplomático de Francia y Marruecos. Además, vinculó la solución de este caso a la aprobación de un acuerdo que refuerza las importaciones de productos hortofrutícolas marroquíes: "Sus intereses agrícolas se refuerzan en la UE en perjuicio de los intereses de los agricultores españoles y ve cómo España reconoce que en el Sahara se aplica la legislación marroquí".

Para Rajoy "aquí todo el mundo gana, salvo el Gobierno español, que cada vez pierde más peso en el mundo, y salvo los agricultores españoles, que se convierten en los paganos de los errores y disparates de Zapatero".

IVA. La política económica también centró gran parte de su discurso. Quizá por la presencia en Málaga y el peso del turismo en la economía local, Mariano Rajoy se refirió al incremento del IVA que se aplica a los productos turísticos a partir del verano próximo. En este sentido, recordó que tanto en Francia, como en Grecia y Alemania se ha bajado este impuesto "mientras que España, con un sector turístico que supone más del 10% del PIB, es el único país en el que sube el IVA".

Para el líder del PP, la receta del Gobierno para salir de la crisis es la contraria a la que se debe aplicar, que resumió en "la austeridad y el control del gasto y de la deuda pública", así como en el descenso de los impuestos "para crear riqueza". Rajoy también abogó por que el gobierno trabaje con el sistema financiero para "resolver el problema del crédito", porque "es difícil ser empresario en España y crear puestos de trabajo, riqueza y empleo".

Partido de gobierno. Javier Arenas defendió que el PP es "un partido de gobierno" y se mostró convencido de la victoria en las elecciones nacionales y andaluzas del año 2012: "Tenemos hambre de gobierno porque sabemos que los andaluces y los españoles vivirán mucho mejor", afirmó. El responsable andaluz del Partido Popular insistió en que cada día que pasa está "más claro" que el PP ganará las elecciones: "Cumpliremos nuestro sueño, gobernar en Andalucía, y que el PP con Mariano Rajoy vuelva a ser Gobierno en España". Arenas indicó que continuarán trabajando para preparar las elecciones municipales porque "tenemos que dar calidad a nuestra alternativa".

Ronda. El presidente provincial del PP fue el encargado de cerrar el turno de los discursos, tras las intervenciones de Arenas, Rajoy y Francisco de la Torre. Bendodo aprovechó para hacer balance de su primer año al frente del PP, citando el gobierno en Benalmádena y la unión del centro-derecha en Torrox como algunos de sus principales logros, además del crecimiento en votos en los pueblos del interior.

No obstante, no quiso pasar la ocasión sin reclamar al PSOE que tome medidas contra el alcalde de Ronda, Antonio Marín Lara, y ocho de sus concejales, que han sido declarados tránsfugas por pasarse al Partido Socialista: "Todo vale para el PSOE, por eso pedimos su expulsión inmediata".

Bendodo también hizo un repaso por los proyectos parados por otras administraciones.