El grupo municipal socialista propondrá en la próximo pleno la introducción en la nueva ordenanza municipal de comercio ambulante la posibilidad de que los vendedores no paguen la tasa cuando no puedan vender, cuando sea "por causa de fuerza mayor externa o por la inasistencia al puesto debidamente justificada, que imposibilite la venta en los días previstos".

El portavoz socialista, Rafael Fuentes, señaló que con esta regulación se daría respuesta a la problemática que afecta a los comerciantes ambulantes, "y se reforzaría la cobertura existente en la actualidad para estos vendedores".

Así, el grupo socialista también solicitará la adopción de las medidas necesarias para "compensar las pérdidas causadas por la adversidad climatológica de los últimos meses, a través de la reducción de las cuotas a pagar durante el año 2010, teniendo en cuenta los días que estos comerciantes no han podido ejercer la venta ambulante".

De la misma forma, Fuentes argumentó que los comerciantes ambulantes de Málaga "necesitan ahora de su Ayuntamiento", institución que "debe responder ante estas circunstancias extraordinarias, como lo ha hecho con otras situaciones en las que el ciudadano malagueño se ha visto en graves circunstancias", apostilló.

En este sentido, destacó que el sector ha sufrido en los últimos tres meses, a causa de las lluvias, pérdidas en ventas valoradas en unos tres millones de euros, a lo que se suma las tasas pagadas al Ayuntamiento en este tiempo que se elevan a unos 460.000 euros, y los gastos derivados del crédito anual al que deben hacer frente por la compra de la mercancía para las temporadas de primavera y verano.

Por otro lado, el portavoz socialista argumentó que "son muchas las asociaciones de comerciantes de otras ciudades las que están solicitando a sus ayuntamientos ayudas por las pérdidas sufridas por las lluvias de los últimos meses, ante la imposibilidad de montar los puestos y vender su mercancía".

Asimismo, Fuentes puso como ejemplo que en Huelva las asociaciones de comerciantes ambulantes han pedido a los ayuntamientos costeros una rebaja en las tasas que tienen que pagar, y también los consistorios de Sevilla y Antequera (Málaga) han reconocido su voluntad política de ayudar a estos vendedores, mientras que Valencia ha establecido la posibilidad de no pagar los días en los que no se puede montar los puestos por causa mayor.

En Málaga capital existen un total de 1.277 puestos de venta ambulante censados, que realizan su actividad en los 15 mercadillos existentes en la ciudad, generando unos 2.600 empleos directos, y otros tantos indirectos.

Por su parte, el presidente de la Asociación de Vendedores Ambulantes Provincial, Juan Rojas; el presidente de la Asociación de Empresarios de Vendedores Ambulantes, Rafael González, y el presidente de la Asociación del Futuro de la Venta Ambulante, Miguel Bermúdez, reclaman una actuación "urgente" por parte del equipo de gobierno del PP, y destacan "sentirse abandonados", tal y como informó el grupo municipal socialista.