La ex mujer del letrado y presidente del Sevilla, José María del Nido, acusada en el «caso Minutas» por las presuntas irregularidades en los encargos profesionales realizados al abogado por parte del Ayuntamiento de Marbella, aseguró ayer que en el procedimiento de la segregación de San Pedro le pagaron de manera aplazada los honorarios que ya le correspondían por el trabajo que había realizado.

En relación con la actuación de la acusada en este procedimiento, el representante del ministerio fiscal apuntó en el juicio, que se retoma tras varias semanas, que en 2000 consta una primera factura de unos 58.000 euros y otros dos pagos de 6.600 euros, aunque precisó que el resto de los meses de 2001 se contabilizaron pagos mensuales también de 6.600 euros.

En este sentido, la acusada explicó que pidió una primera minuta mayor «para lanzar el procedimiento» y luego se hizo un aplazamiento del total por meses «porque la minuta iba a ser muy grande», de unos 100 millones de pesetas. Apuntó que, al haber ya contestado la demanda y haber propuesto prueba, «ya había devengado», es decir, tenía derecho a pedir el 80 por ciento de los honorarios.

Cuestionada por si los 120.000 euros que se le pagó en total eran los que tenía que haber cobrado desde el primer momento, la acusada aseguró que «no, que tenía que haber cobrado más». «Ahora me arrepiento de no haberlo reclamado», afirmó.

La Fiscalía Anticorrupción considera que el que fuera alcalde marbellí, Jesús Gil, contrató a esta acusada de forma «oral», sin convocatoria pública «y por puro capricho», en beneficio de José María del Nido.