El PP ha denunciado este viernes la expulsión de tres niños, de entre 10 y 22 meses, de la guardería de la Diputación "por un conflicto entre la directora del centro y el presidente de la institución provincial", Salvador Pendón, según ha precisado en rueda de prensa el portavoz del PP en la Diputación Provincial, Francisco Salado.

Los padres, que ya disponían de una plaza subvencionada por la Junta en otra guardería pública cuando les comunicaron que sus hijos habían sido admitidos en el centro provincial, sólo han recibido una carta a nombre de la diputada delegada de Educación, Lina Vidales, para comunicarles la noticia.

La carta contempla que, "desconociendo los motivos de esta decisión", pone "en conocimiento que, por la decisión del equipo de Gobierno de esta corporación provincial, su hijo pasará a causar baja en este centro infantil" a partir del 1 de noviembre.

De esta forma, las familias conocieron la noticia sólo 20 días antes de la expulsión de sus hijos, por lo que aseguran que no disponen de "tiempo material" para encontrar otra guardería. Por ello, se preguntan "qué ha podido hacer un niño de meses para que lo echen" y denuncian que "somos las únicas víctimas de un problema político o de la administración con el que no tenemos nada que ver".

Por este motivo, han asegurado que "estamos dispuestos a todo", mientras que uno de los padres ya ha recurrido por vía contencioso administrativa, según Salado quien, además, ha explicado que 30 de los 160 niños con los que cuenta el centro no son hijos de empleados, como ocurre en este caso. Así, la única diferencia con el resto es que han entrado durante el nuevo curso 2010-2011.

Según el portavoz, la directora del centro, que hasta el pasado lunes ostentaba un cargo de libre designación, "ha sido cesada" por Pendón.

De esta forma, ha denunciado que la decisión ha sido llevada a cabo con la "máxima arbitrariedad" y, por tanto, "una gran inseguridad jurídica para el acceso de los niños". En este sentido, ha solicitado al equipo de Gobierno de la Diputación que se "regulen" las plazas para lo que, además, se han prestado a colaborar una vez se solucione el conflicto "para que entre en el circuito de la Junta".

Sin embargo, han advertido que, de momento, "van por las buenas", pero "si Pendón no justifica, iremos por las malas", denunciando "un delito de presunta prevaricación por el abuso de poder por parte de un miembro del equipo de Gobierno".

Readmisión

Según han anunciado desde el equipo de Gobierno de la Diputación a Europa Press, los tres niños expulsados serán readmitidos "para no causar mayores perjuicios". Asimismo, han asegurado que la decisión fue comunicada este jueves a la diputada delegada de Educación a pesar de que, al día siguiente, los padres desconocían la noticia.

De igual modo, han explicado que la expulsión responde a "la necesidad de adaptar las prestaciones a los gastos de la Diputación", de forma que el centro cumpliera el cometido de "guardería laboral", dirigida únicamente a hijos de empleados.

En este sentido, han manifestado su intención de que ésta se trate de "una situación a extinguir", motivo por el que decidieron aplicar la medida "paulatinamente" durante el nuevo curso con los niños de nuevo ingreso. De esta forma, han asegurado que "intentamos cuadrar los gastos del centro con los ingresos de los niños".

Así se lo trasladaron a la directora de la guardería que, según han asegurado desde la Diputación, "nos dice que ya ha admitido esas solicitudes". Así, alegan a la "pérdida de confianza" como única razón para cesarla ya que, según han afirmado, "asume criterios contrarios al equipo de Gobierno".

De esta forma, han acusado a la directora del centro provincial como "responsable directa" de este conflicto "al tomar las decisiones por su cuenta y riesgo".