El acto de constitución del nuevo Parlamento andaluz ha dejado tras de sí una notable presencia de diputados malagueños con cargos y puestos de responsabilidad en cada una de las formaciones. Sin duda la más destacada es la portavocía, adjunta de momento, del además coordinador provincial de IU, José Antonio Castro.

Por el Partido Popular, la cuota malagueña recae en Ana María Corredera, portavoz adjunta; y, Esperanza Oña, que queda descabalgada de la portavocía y ocupa la vicepresidencia segunda del Parlamento. En lo que al PSOE se refiere, Remedios Martel es la secretaria tercera de la Cámara.

Castro e Izquierda Unida. «Estoy muy agradecido y muy contento de que hayan depositado en mi esa confianza, y más en una legislatura que va a ser compleja, donde el papel de IU va ser determinante y ante un escenario en el que Andalucía plantea una lógica distinta a la del resto de España. Me han puesto en un momento muy especial», comentaba José Antonio Castro a este periódico.

Este joven político malagueño, trabajador incansable, hace tiempo que destaca por su labor tanto parlamentaria como en la dirección de la formación en la provincia. Es además mano derecha del coordinador regional, Diego Valderas. Éste último es el portavoz «provisional» de la formación en la Cámara hasta que se culmine el pacto y pueda afrontar nuevas responsabilidades. Valderas ha incluido a Castro también en el comité negociador de esa futura alianza entre PSOE e IU para gobernar la Junta. Castro pinta, y pinta mucho. Ya hay quien lo ve incluso como un posible y más que solvente sustituto de Diego Valderas. Y es que Málaga siempre ha tenido un peso específico en la coalición de izquierdas. Durante muchos años ha sido la provincia que más alcaldías ha sumado incluso de España.

Oña, Corredera y el PP. La parlamentaria andaluza Ana María Corredera será la portavoz adjunta del PP en la Cámara regional, sumando peso frente a sus anteriores responsabilidades. Además, será portavoz de Sanidad.

El movimiento más llamativo ha sido sin embargo el efectuado en torno a la figura de la que hasta ahora fuera portavoz del PP, Esperanza Oña, que queda descabalgada de esta notable y relevante labor para ser la vicepresidente segunda de la mesa. Finalmente éste será su cometido, no sin que antes el partido y el propio Javier Arenas lanzasen una propuesta que ya desde su inicio se conocía que era inviable e irrealizable, pretendiendo que Oña fuese la presidenta del Parlamento, algo que no aceptarían ni PSOE ni IU. Finalmente ésta no ha sido presentada para este cargo siquiera.

El caso es que Arenas aleja de su núcleo duro a la hasta ahora portavoz del PP y machaque del gobierno de Griñán, parcela en la que ha desarrollado una destacada labor. Falta por conocer si Oña abandonará la alcaldía, ya que existe una norma que impide ahora esta duplicidad, aunque el PP espera al pronunciamiento definitivo del Tribunal Constitucional.

Quizás fue esta tensión la que provocó que Oña ayer olvidara recoger la medalla tras el juramento del cargo ante lo que fue alertada por sus compañeros de escaño. El PP ya ha distribuido además las responsabilidades del resto de diputados malagueños en las diferentes comisiones. Antonio Garrido será el portavoz de Cultura del PP; Víctor González, de Política Municipal; Antonia Ruiz, de Formación Profesional; José Eduardo Díaz, de Innovación; Ana Rico presidirá una comisión aún por definir -cuando se conozca la configuración del gobierno- y Daniel Castilla será el portavoz de pymes y autónomos.

Martel y el PSOE. La que fuera delegada del Gobierno andaluz en Málaga, Remedios Martel, será la secretaria tercera del Parlamento. La malagueña ha protagonizado una meteórica carrera política en los últimos años y cuenta con la confianza de la dirección provincial del Partido Socialista. Además, el futuro gobierno de José Antonio Griñán contará como es habitual con la esperada cuota malagueña de representantes aún desconocida.