A pesar de la crisis, todavía son 35.000 los trabajadores malagueños que día a día faenan en las obras de la provincia –ya sean públicas o privadas– y que, llegados el verano, se enfrentan a jornadas de tremenda exigencia física, con temperaturas infernales por encima de los 40 grados. El sindicato CCOO lleva años luchando por conseguir que las empresas del sector cumplan el denominado horario de verano, que pasa por una jornada intensiva que arranca a las siete de la mañana y acaba a las dos de la tarde, evitando las horas de máximo calor.

Los sindicatos han pactado para este 2012 con la patronal ACP que el horario intensivo arranque el 16 de julio y se prolongue hasta el 31de agosto, aunque todavía no han logrado el compromiso del horario unificado por lo que muchas empresas colocan esas siete horas a su conveniencia. El secretario de Construcción de CCOO en Málaga, Alfonso Galisteo, lamenta también que haya aún empresas que continúen incluso con las jornadas partidas durante los meses de julio y agosto, aunque la concienciación ha ido dando frutos y las denuncias ante la Inspección de Trabajo van bajando –100 en el año 2010, 48 en 2011–.

El sindicato presentó ayer precisamente una campaña preventiva contra los golpes de calor que se pueden producir trabajando a altas temperaturas, y cuyos síntomas incluyen taquicardia, respiración rápida y débil, tensión arterial elevada o baja, disminución de la sudación, irritabilidad, confusión o desmayos. «Nosotros aconsejamos que en verano la hora más recomendable para iniciar la jornada esa partir de las siete de la mañana, realizando las labores de mayor esfuerzo a primera hora para evitar los golpes de calor, y acabando a las dos», comenta Galisteo. A día de hoy, no hay contabilizado en Málaga ningún accidente laboral producido por golpes de calor, aunque el motivo, indica, es porque la administración «no los contabiliza como tales, sino como contingencias comunes». Sin embargo, según un estudio elaborado a nivel estatal por CCOO ya arrojaba que al menos un 12% de los accidentes laborales que se producen en el sector son debidos a la influencia de las altas temperaturas veraniegas sobre el organismo. Por ello, los técnicos del sindicato vienen realizando una labor de información desde el mes de mayo en todas las empresas del sector para que sean los propios trabajadores los que reclaman la aplicación de la jornada continua.