Aún queda para terminar de revisar los datos y cuadrarlos con los que dispone la Agencia Tributaria. Sin embargo, y aunque aún queden las ayudas de estudio de la Junta, el el vicerrector de Estudiantes de la Universidad de Málaga, Juan antonio Perles, planea crear una convocatoria de becas de emergencia con fondos propios, para compensar. Al menos 60.000 euros de ayudas a universitarios que sean víctima de situaciones «sobrevenidas», es decir, cambios familiares en el último año y que no se recogen en la declaración de la Renta, en la que se incluye la información fiscal del año anterior. «Hablamos de estudiantes que vivan en el seno de una familia en la que alguno de sus miembros se haya quedado en el paro o se haya producido una separación», puso como ejemplo.

El vicerrector informó de que en estos momentos se encuentra buscando fondos para dotar presupuestariamente esta tercera vía de ayudas para que ningún alumno tenga que abandonar sus estudios por cuestiones económicas. «Me quedaría la mitad del dinero», asegura Juan Antonio Perles.

Se trata de una ayuda más social, «será humilde y estamos pidiendo la colaboración de distintas entidades», explicó el vicerrector. Otros 60.000 euros, pese a los recortes y a la merma en los ingresos de la UMA, para facilitar que haya alumnos que puedan seguir ligados a la institución académica.