A partir de hoy la Empresa Municipal de Aguas EMASA comenzará a aplicar a sus clientes la nueva facturación, una fórmula que tiene en cuenta el número de personas que residan en la vivienda y que conocerán a través del padrón de la capital.
Tras las confusiones generadas sobre las cartas de aviso por parte de la empresa municipal, la Unión de Consumidores detalló que durante los dos primeros meses, EMASA aplicará la solución más favorable a las comunidades que no tienen regularizada su situación de empadronamiento o que no coinciden con las direcciones de facturación: si atenerse al número de habitantes que tengan censados en ese momento o si aplican el consumo diario promedio por persona en la ciudad de Málaga, calculado en 112 litros. Pasados estos dos primeros meses, EMASA enviará sus recibos en base a los habitantes empadronados en ese edificio.
Otro de los puntos aclarados por la Unión de Consumidores, al asistir a las múltiples comisiones reunidas para el estudio de esta facturación que se aplica desde hace cuatro años en Sevilla, es que las comunidades de vecinos, a través de sus administradores, tienen dos meses de plazo -tras recibir su primer recibo con la nueva facturación- para regularizar la situación de empadronamiento de sus residentes así como para la comprobación de direcciones exactas de cada inmueble. Para tranquilidad de los usuarios, las irregularidades observadas serán corregidas cuando los datos del empadronamiento sean actualizados.
