Los empresarios presentaron ayer un decálogo con una serie de recomendaciones y medidas que tienen como fin hacer de Andalucía «un lugar atractivo para la inversión y una sociedad realmente competitiva». El presidente de la CEM y de la CEA, Javier González de Lara, dijo que «crear empresas es crear empleo», por lo que reclamó una mejora de la financiación y de la fiscalidad relativas a las sociedades y una política de industrialización para Andalucía. A su juicio, Andalucía necesita 100.000 nuevas empresas que añadir a sus actuales 480.000 para poder generar al menos 500.000 nuevos puestos de trabajo.

En este sentido, el representante de la patronal sí destacó el dinamismo económico de la provincia de Málaga en relación al entorno andaluz. Según sus datos, la provincia tiene una densidad empresarial de 67 empresas por cada 1.000 habitantes, superando tanto la media española (66) como andaluza (56).

Para González de Lara, es necesario obtener en Andalucía una «armonización fiscal» con el resto de España (IRPF, Sucesiones y Donaciones) y simplificar un marco normativo, en su opinión, excesivo en volumen. «La clave es avanzar en la desregulación y legislar pensando en la empresa, dejando fuera la ideología», dijo.

Del mismo modo, emplazó a las administraciones a una política proindustrial de largo plazo y estable, de carácter transversal, que permita incrementar el peso de los sectores industriales en la economía. Otra recomendación es la de reforzar la imagen de Málaga y de Andalucía con la creación de una oficina de la marca Andalucía para «desterrar y romper tópicos y estereotipos».

También se reclama seguridad jurídica para las empresas y lealtad y coordinación entre las administraciones públicas, además de una apuesta por sectores estratégicos de alto valor añadido y por una revitalización de segmentos como el de la construcción.