Los principales acusados de formar parte de un grupo dedicado a traficar con drogas y al blanqueo de capitales se mostraron ayer conformes con los hechos por los que se les acusa y con las penas solicitadas por la Fiscalía tras modificar sus conclusiones iniciales para rebajar algunas penas. El juicio se celebra en la Sección Primera de la Audiencia de Málaga para otros 14 procesados.

La acusación sostiene que el principal procesado y su compañera sentimental se venían dedicando en 2005 a la venta de droga a gran escala, sustancia que guardaba el hijo de ambos, quien, además, se lucraba con los beneficios del negocio. La cocaína la compraban a varios proveedores sudamericanos, uno de ellos afincado en Madrid. Estos cuatro procesados han mostrado su conformidad con los hechos.

Así, al matrimonio se le han impuesto dos años de prisión por un delito contra la salud pública y otro año y medio de cárcel por el de blanqueo, más multa de 260.000 euros; mientras que al hijo de los anteriores se le impone tres años en total por los dos delitos; y el proveedor se ha mostrado conforme con la pena de dos años de cárcel y multa de 160.000 euros por tráfico de drogas. De las escuchas telefónicas se desprende que organizaron una operación para comprar cuatro kilos de cocaína. Según el fiscal, para la distribución de la droga, los principales acusados utilizaban a personas, algunas con parentesco entre sí. De éstas, tres se han conformado con la pena de un año de prisión y otras no han llegado a un acuerdo.