Garantizar el buen funcionamiento de los servicios básicos de la capital malagueña, una ciudad con cerca de 600.000 habitantes, es una tarea esencial del Ayuntamiento que se hace posible gracias a los impuestos de los ciudadanos. Garantizar la limpieza, el mantenimiento de los jardines, los semáforos, los autobuses, el alumbrado público o el abastecimiento de agua, la seguridad policial o a los bomberos, suponen una elevada factura anual que este año estará en torno a los 200 millones de euros.
Málaga tendrá este año unos 732 millones para gastar ¿De dónde sale ese dinero? La mayor parte, algo más de 400 millones, del bolsillo de los malagueños; el resto del bolsillo de los andaluces y del resto de los españoles a través de los fondos que envían el Estado y la Junta de Andalucía.
Pero, ¿cómo y en qué se gasta ese dinero? Veamos aquí el gasto y el reparto entre los servicios básicos que garantizan el día a día de la ciudad.
Dejando a un lado el gasto del personal municipal, sin duda la cifra más abultada con diferencia en esta factura es la que se paga por el servicio de limpieza de calles y recogida de basura. El gasto para 2016 asciende a 89 millones y en él se incluye también el coste por la planta de tratamiento. A pesar de las quejas ciudadanas por las deficiencias del servicio, la factura de la limpieza de la ciudad supone una sexta parte del total que se abona por el mantenimiento de la ciudad.
El transporte urbano es esencial en una gran ciudad. El mantenimiento de la flota de más de 200 autobuses y de casi 50 líneas alcanzará los 56,9 millones este año para permitir el desplazamiento de los malagueños por la ciudad. Un capítulo importante tanto para conductores como para los peatones es el buen funcionamiento de los semáforos y de las señales de tráfico verticales y horizontales. A su conservación y mantenimiento, el Ayuntamiento destinará este año algo más de 7 millones.
El alumbrado público de la ciudad también es un servicio esencial de primer orden y se lleva un importante pellizco de esta factura diaria: 18,8 millones de euros son necesarios al año para iluminar la ciudad pese a la incorporación cada vez más de lámparas de bajo consumo y de programas de ahorro energético.
Un apartado relevante en la conservación de la ciudad es el cuidado de las zonas verdes, de sus parques y jardines. La factura para este menester supera ligeramente los 17 millones de euros en pagar a las empresas privadas que están contratadas para el mantenimiento de los parques y espacios públicos y permitir su disfrute.
La seguridad ciudadana, la vigilancia de sus calles, el mantenimiento del orden y el respeto a las normas de convivencia, está a cargo de los cerca de mil agentes de la Policía Local. El coste de la seguridad pública superará este año los 59,7 millones de euros.
El trabajo del cuerpo de Bomberos, fundamental y necesario para cualquier ciudad, ya no es sólo apagar fuego, sino que han ampliado mucho su abanico de intervenciones y cuentan con una plantilla cada día mas especializada. El coste de esa plantilla y de una maquinaria cada día más sofisticada es de 24,5 millones este año. Junto a bomberos está el servicio de Protección Civil, con 555.198 euros.
Llevar el agua a los hogares de todos los ciudadanos, mantener en perfecto estado los desagües de las viviendas, el saneamiento y el alcantarillado de la ciudad para que las lluvias no inunden las calles supondrá este año a Emasa 70,9 millones de euros.
