La Diputación de Málaga ha triplicado las ayudas a las pequeñas y medianas empresas agroalimentarias y ganaderas en la provincia, con 350.000 euros que serán destinados a modernizar sus instalaciones. El presidente de esta institución, Elías Bendodo, habló de la necesidad de fortalecer un sector constituido por más de 750 empresas y 9.000 trabajadores. También indicó que estas subvenciones tienen como objetivo mejorar la competitividad de las empresas con proyectos que «redundarán en una mayor productividad y en la generación de más empleo».

Bendodo, acompañado del presidente de la Confederación de Empresarios de Málaga (CEM), Javier González de Lara, y el presidente de la Asociación Agraria de Jóvenes Agricultores (Asaja), Baldomero Bellido, afirmó que el reto de este organismo es conseguir que, dentro de unos años, el sector agroalimentario sea tan potente como el turístico», por lo que incidió en la importancia de la colaboración público-privada para mejorar la producción y generar mayor riqueza y empleo. Las ayudas oscilarán entre un mínimo de un 35% y un máximo de un 50% del presupuesto total del proyecto, con una cuantía máxima por empresa de 35.000 euros. Las subvenciones se destinarán a financiar la inversión en maquinaria, herramientas, equipos y sistemas de gestión o equipos auxiliares, destinado a empresas y autónomos con menos de 50 empleados y con un volumen de negocio inferior a 10 millones de euros y con sede social en la provincia.

El número de trabajadores y la ubicación geográfica de las empresas son dos de los criterios de valoración para la concesión de las ayudas, por lo que beneficiarán a las empresas con más empleados y de municipios más pequeños. También se valorará el carácter innovador del proyecto, el grado de modernización, la incidencia en el desarrollo de la economía local y el compromiso como empresa socialmente responsable.

Por su parte, González de Lara explicó que estas subvenciones «ayudan a fortalecer y consolidar el tejido empresarial, modernizando las estructuras productivas y, por tanto, ayudando a mejorar la competitividad de las empresas», algo que consideró muy positivo.