«Que la arreglen, por lo menos para nosotros no, para los venideros. Yo no llego a verla», comenta descorazonado José Pinazo, Puchi. Él es uno de los vecinos de la calle Aurora Boreal -en las playas de Pedregalejo- que ha perdido la fe en el Ayuntamiento ante la falta de respuesta por los muchos problemas de la calle.

«El tendido eléctrico es tercermundista, luego el piso, cada uno viene, hace su agujero, repara y tapa. Aquí hay agujeros de los que salen ratas y los vecinos, cada vez que tienen un poquito de mezcla que les sobra, los van tapando», cuenta Paco Valle, otro de los vecinos.

La calle Aurora Boreal parece la versión urbana de Hágalo usted mismo porque, como destaca Paco, «tenemos escritos desde 2002 enviados a la junta de distrito en los que nos prometieron que la calle se arreglaría en los próximos presupuestos. Llevamos 15 años de promesas», lamenta.

Ante la falta de respuesta municipal, en 2011 los vecinos decidieron arreglar por su cuenta una callejuela, Clavileño, que desemboca en el vecino paseo marítimo. Se trata de un estrecho pasillo que estaba a un nivel inferior que el resto de la calle y el paseo, por lo que se formaba una piscina cada vez que llovía. «Como íbamos de denuncia en denuncia y aquí no venía nadie, aprovechamos que estaban haciendo una obra abajo para pedirle presupuesto a un hombre y nos la arregló. Fueron 1.175 euros», comenta Paco Valle. La obra incluyó una nueva red de saneamiento, porque estaba rota la tubería, pero el mismo problema tienen en la vecina callejuela Calipso, que también conecta Aurora Boreal con el paseo marítimo y se les inunda.

«El agua levanta las arquetas y cuando se va, los vecinos tenemos cada uno una escoba para limpiar», explica José Pinazo.

Por su parte, Ángela López cuenta los muchos años que ha costado que el Ayuntamiento reemplace las farolas «de hace 50 años» por unas en condiciones.

En cualquier caso, la maraña de cables de la luz también preocupa a los vecinos. Como recuerda Paco Valle, «hay arquetas de Endesa a ras de suelo completamente y cada vez que hay chispazos, se va la luz». Este vecino calcula que la calle sufre apagones «cada tres o cuatro meses». Pero además, «más de un poste de la luz ha salido ardiendo», comenta Ángela López.

A finales de noviembre, junto con la asociación de vecinos, el alcalde, Francisco de la Torre, estuvo en la calle, durante una visita al barrio. La asociación de vecinos reclama que Aurora Boreal tenga una solería digna, nueva red de saneamiento y redes pluviales, así como un tendido eléctrico soterrado y renovado.

«Le dijimos al alcalde que es una calle de todos los vecinos y de todos los que estamos andando , incluido él», resume Adolfo García, de la asociación de vecinos.

«Queremos lo mismo que en la calle Pepote, qué menos que estuviera igual que aquello», pide Paco Valle.

Fuentes del distrito contestaron ayer que la intención es «seguir trabajando en la zona de Pedregalejo» y que se evaluará con la Gerencia de Urbanismo cuánto costaría la obra, aunque precisaron que «hay otras pendientes».