La Fundación Diocesana de Enseñanza Santa María de la Victoria cumple 25 años. Se trata de una organización del Obispado de Málaga heredera de las antiguas escuelas rurales, una obra más que centenaria comenzada por el obispo Juan Muñoz Herrera en 1909 y proseguida por el santo obispo de la Eucaristía y de la educación, Manuel González García. Los colegios diocesanos tuvieron el impulso definitivo del cardenal Herrera Oria, que en un contexto ciertamente limitado, con elevadísimas tasas de analfabetismo (más del 70% de la población de la provincia no tenía ningún tipo de instrucción), envió un auténtico ejército de maestros a los pueblos, la mayoría mujeres, para hacer accesible el derecho a la educación a todos, aunque vivieran en el campo.

La Fundación Diocesana de Enseñanza Santa María de la Victoria nace como tal el día 1 de noviembre de 1992. Y fue fruto de la fusión y transformación en una única organización de los antiguos Patronato Mixto de Educación Primaria (esas antiguas escuelas rurales que acercaban la educación a las zonas menos accesibles y más deprimidas), Patronato Diocesano de Enseñanza (colegios diocesanos de Málaga y Marbella) y Patronato de Santa Rosa de Lima (Centro de Bachillerato).

Llegó a haber 265 escuelas rurales con unas 200 maestras y unos 50 maestros. Además de enseñar, tenían por misión primordial evangelizar en aquellas zonas en las que se incardinaban, como se ponía de manifiesto en su concepción de «capilla-escuela». Para desarrollar toda esta labor, estos docentes tuvieron que formarse y especializarse.

Como recuerda la página web del Obispado de Málaga, el 1 de noviembre de 1992, el entonces obispo administrador apostólico, Fernando Sebastián Aguilar, hoy también cardenal, ponía en marcha esta plataforma educativa que reunía a los distintos patronatos docentes de la Iglesia de Málaga. «Llevaba poco más de un año como administrador apostólico de la diócesis, pero desde el principio me había preocupado por conocer la situación de las escuelas rurales», recuerda. «Por entonces las leyes del Gobierno comenzaban a marcar pautas y a señalar exigencias. Todo aquello podía quedar comprometido en poco tiempo, era urgente darle una consistencia y asegurar la continuidad de aquel despliegue educativo de la Iglesia, que había hecho tanto bien y que seguía siendo tan valioso». Por este motivo, surge la Fundación como titular único de todos los centros.

Los actos con motivo de este importante cumpleaños se presentarán el próximo 28 de noviembre en el Teatro Cervantes, durante un acto institucional de apertura del 25 aniversario, durante el cual intervendrán diversas autoridades y donde habrá una parte musical dirigida por Marco Frisina en la que se interpretarán tres arias breves del Oratorio Pasión de Cristo, que se estrenará, también en el Cervantes, el próximo mes de abril, junto a la Orquesta Filarmónica y la coral Carmina Nova.