Alternativa Sindical pide más vigilantes en la Alcazaba y Gibralfaro

Alternativa Sindical, el sindicato de vigilantes privados de seguridad, ha dado la voz de alarma por la situación «insostenible» en la que se encuentra la vigilancia en la Alcazaba y el Castillo de Gibralfaro, con sólo un vigilante las 24 horas por cada uno de estos monumentos histórico-artísticos. 

«Una sola persona no puede hacerse cargo de la seguridad de unos monumentos de este tipo, es algo insostenible», subraya Cristóbal Soriano, delegado en Málaga y provincia de Alternativa Sindical.

Castillo de Gibralfaro: pura ruina

Para el responsable sindical, en estos últimos años ha aumentado de forma exponencial el número de visitantes pero no el personal de seguridad y al no adecuarse el número de vigilantes al público, el Ayuntamiento podría estar incumpliendo alguna normativa de seguridad, manifestó.

Para Cristóbal Soriano, es imprescindible, como mínimo, que haya dos vigilantes tanto en la Alcazaba como en Gibralfaro mientras están abiertas al público.

Como explica, momentos especialmente masificados como los domingos por la tarde, cuando es gratis la visita a estos dos Bienes de Interés Cultural, obligan al personal de seguridad a permanecer en la entrada y a no hacer rondas por el resto de cada fortaleza.

Esta situación, indicó, viene de la mano de la falta de cuotas de entrada y de momentos del año en los que, por la acumulación de cruceros, pueden acudir de 15 a 20 autobuses a Gibralfaro, lo que forma un atasco de tráfico que además impide la llegada de policía, ambulancia o bomberos si se necesitara.

«Se han dado casos de infartos en los que el vigilante tiene que dejar sola a la persona infartada para ir a la entrada a por el desfibrilador. En la Alcazaba había antes un informador pero también lo quitaron», lamenta el delegado de Alternativa Sindical, que señala que también se prescindió de un perro en Gibralfaro que alertaba si entraban intrusos.

En relación con esto, el representante sindical explica que en Gibralfaro, por la noche, «saltan la barbacana» mientras que también se cuelan en la Alcazaba, tras un reportaje en televisión que informaba de supuestos ‘fantasmas’ en la fortaleza árabe.

En muchas ocasiones, precisa, «son extranjeros que saltan dentro creyendo que es un parque y no un monumento, cuando al entrar están cometiendo un delito».

Cristóbal Soriano aprovecha para pedir la instalación de más cámaras de seguridad pero también de monitores que puedan ser usados en tiempo real por el personal de vigilancia, «porque las cámaras no las podemos visualizar en directo, sólo están grabando por si pasara algo».

Para el coordinador de Alternativa Sindical, «mientras más seguridad tengamos mejor le irá a estos monumentos» y aprovecha para recordar que, también en el exterior de los BIC, en la subida a Gibralfaro, falta policía por el aumento importante de los carteristas.

Respuesta del Ayuntamiento

Fuentes municipales informaron el pasado viernes de que al contrato con la empresa que ahora mismo presta el servicio de seguridad le queda un año en vigor. «En el próximo pliego, en el que se está trabajando, se está estudiando reforzar la seguridad».

Con respecto a la petición de cámaras de vigilancia, «al tratarse de un BIC, los trámites son más complejos y hay que estudiar el lugar adecuado», indicaron, al tiempo que informaron de que se estudia contratar «una treintena de equipos» para desplegarlos en «monumentos, fuentes, espacios representativos y lugares de interés cultural de la ciudad».

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