­La Junta de Gobierno Local del Ayuntamiento de Antequera ha dado el visto bueno a la aprobación inicial de la innovación del Plan Especial de Protección, Reforma Interior y Catálogo del Centro Histórico de Antequera (PEPRI). Esta adaptación permitiría que sólo las actuaciones de demolición en entornos de Bienes de Interés Cultural (BIC) necesiten el informe de la Junta de Andalucía para poder tramitar una licencia de obra, reduciéndose así en el resto de casos los plazos de concesión del permiso, con el consecuente ahorro de tiempo y agilizando de manera significativa el proceso.

El objetivo de esta modificación del PEPRI, según apuntó el Consistorio antequerano en un comunicado, es «redefinir» sus límites para su adaptación a los del Conjunto Histórico, lo que supone la inclusión de nuevos espacios. Asimismo, se pretende representar gráficamente los entornos de los BIC e incorporar las normas de protección que deben ser aplicadas, con la finalidad de que éstos queden suficientemente regulados por el planeamiento urbanístico de protección, pudiendo ser aplicado el artículo 40.2 de la Ley de Patrimonio Histórico de Andalucía. De esta manera, la Administración local sí podría tener delegada la concesión de licencias en dichas obras.

Entre las zonas de la ciudad del Torcal que se quieren incluir ahora con la nueva iniciativa se encuentran el entorno de la Plaza de Toros de Antequera y el Paseo Real, así como del Colegio María Inmaculada, más calles del barrio de San Pedro y hacia la avenida de la Legión, la barriada de Jesús y la de San Juan y la zona de la Moraleda.

La concejala delegada de Urbanismo del Ayuntamiento de Antequera, Teresa Molina, mostró ayer su satisfacción por los trabajos realizados por parte de los técnicos responsables del área para conseguir este «avance» y así reducir el tiempo a la hora de tramitar una obra en zonas de entornos catalogados como Bien de Interés Cultural. «Estamos hablando de una mejora en la legislación que conlleva un beneficio directo a nuestros vecinos», consideró la edil en el comunicado de prensa remitido por el propio Consistorio.

Como apuntó la concejala del equipo de gobierno, el nuevo documento entra ahora en una fase de exposición pública, la cual tendrá una duración de un mes. Además, el mismo necesita de informes favorables por parte de las consejerías autonómicas competentes en materia de Patrimonio Histórico y Urbanismo para que quede aprobado definitivamente y pueda comenzar a llevarse a la práctica.