Los fumadores y educación

Hay dos cosas que me llaman especialmente la atención de los fumadores (son realmente más, pero dos son las principales). En primer lugar me asombra, asusta y preocupa como aún a día de hoy y manejando la información que se maneja seguimos viendo como la gente joven de 15 o menos años, pasean despreocupadamente por la calle cigarro en mano. Parece que toda la información que existe sobre la nocividad del tabaco es insuficiente o no ha llegado correctamente a las nuevas generaciones ya que siguen apuntándose al vicio. Es como si la imagen que antaño se proyectaba que fumando aparentabas ser ya ‘mayor’ o un tío/a duro aún perviviese en nuestro (su) subconsciente. Las multinacionales cancerígenas están haciendo bien su trabajo. La otra es el acto reflejo del 99.9% de los fumadores de, según se acaba el cigarro, tirarlo despreocupadamente al suelo. No importa la presencia de papeleras cercanas, con su correspondiente apaga cigarros en la parte superior. Lo mismo da: la colilla al suelo o a enterrarla en la arena de la playa, y a otra cosa.

Supongo que esto es una muestra más de nuestro civismo.

Francisco Cazorla. Málaga