La Feria de Málaga dice adiós. Después de estos días de fiesta, toca hacer balance de los resultados de este año. Para los empresarios, una edición poco productiva; para los asistentes, igual de concurrida que la edición anterior. De uno u otro lado, esta Feria no ha tenido la acogida que se esperaba y en ciertos aspectos se ha notado la crisis. La mayoría se lamenta del recorte de un día en la semana de fiestas y achaca a la actual situación económica que el ambiente no haya sido el de otras ediciones.
Con respecto a los empresarios, muchos de ellos se lamentan del enorme impacto económico que ha tenido la crisis en estos días de fiesta. Los feriantes se quejan de los gastos y pérdidas que supone el recorte de un día de Feria, sobre todo al tratarse de un día festivo como el domingo. «Los costes que acarrea el montaje y mantenimiento de un establecimiento son muy altos para escatimar» en jornadas festivas, explicaba un empleado de una caseta del recinto ferial.
Menos altercados
Este año, afortunadamente, se han producido menos altercados que en otras ocasiones. A pesar de eso, agentes de Protección Civil y sanitarios aseguran que las intoxicaciones por consumo de alcohol siguen siendo una de las urgencias más atendidas en las noches del Real. Se ha percibido un descenso en los casos de shock producidos por la ingesta de estupefacientes, aunque ha habido que lamentar algunas situaciones dramáticas durante estos días. Preocupantes son también algunas de las peleas que se han producido en el Cortijo de Torres, aunque las lesiones producidas son «de leve gravedad» y hay que felicitarse porque «ésta ha sido una Feria más pacífica» que otros años, nos comentaba un agente de seguridad.
El Real de la Feria ha contado este año con una carpa de alquiler de sillas de ruedas, una de las iniciativas propuestas por el Ayuntamiento en un convenio con la empresa privada La clínica en casa. Lina Ramírez, empleada del stand, explica que este servicio gratuito ha funcionado correctamente y ha tenido una buena acogida, pero también aclaró que la mayoría de personas desconocían esta opción.
En definitiva, esta Feria ha contado con la cara y la cruz de todas las fiestas. Diversión a raudales pero un gran vacío económico que será difícil de superar.
