No sólo en Jerusalén quedan lugares para recordar el camino de Jesús. Desde Belén a Caná o Cafarnaún, el peregrino puede visitar hoy día los sitios en los que Cristo nació y vivió antes de encontrar su destino en tierra santa.
En Belén nació Jesús y allí se encuentra la Basílica de la Natividad, considerada la más antigua del mundo y sobre el lugar en el que María dio a luz al Salvador, que se encuentra en una gruta bajo el templo. En Nazaret, Jesús vivió con María y José y allí se puede visitar la Basílica de la Anunciación, sobre el lugar en el que la tradición dice que Gabriel se apareció a María.
En Cafarnaún residió durante un tiempo Jesús y allí dicen que curó a muchos enfermos y comenzó a extender su palabra. De Cafarnaún eran originarios Pedro, Andrés o Santiago y en la ciudad se encuentra la iglesia de la Casa de Pedro, junto al lugar en el que se cree que vivió el apóstol, y también la iglesia de los Siete Apóstoles.
En la ciudad de Tabgha, cerca de una de las orillas del mar de Galilea, se encuentra el lugar donde se produjo la multiplicación de los panes y los peces, donde también se construyó una iglesia, que fue destruida en el año 614, para ser descubierta muchos siglos después. Y en la misma ciudad, en la capilla de la Primacía, dice la tradición que Jesús se apareció a sus discípulos.
