La riqueza histórica de Málaga es indudable. Para ratificar todavía más esta importancia, se suma el hallazgo de restos fósiles con características salobres en una zona próxima a La Hoya de Málaga, que abarca el bajo valle del Guadalhorce y una parte del Guadalmedina, por parte de unos investigadores de la Universidad de Málaga (UMA). Estos restos tienen una antigüedad de poco más de 5,4 millones de años en una nueva unidad estratigráfica conocida como Lago-Mare, depositados en el Mediterráneo al final del Messiniense (Mioceno superior).
Este descubrimiento tiene un «interés especial», aseguró el responsable del hallazgo y profesor de la UMA, Francisco Serrano, ya que se trata de unos yacimientos de agua con una salinidad más baja a la marina y con una fauna que procede del Mediterráneo más oriental y que muestran una etapa mediterránea «muy particular».
Los investigadores de la UMA Francisco Serrano Lozano, Antonio Guerra-Merchán y Serge Gofas, en colaboración con expertos italianos, encontraron los fósiles en sedimentos arcillosos depositados en un medio de estuario. Estos materiales forman parte de dos secuencias estratigráficas constituidas por depósitos aluviales sobre los que se superponen los depósitos de estuario. La secuencia inferior contiene abundante fauna de moluscos caracterizada por bivalvos, gasterópodos no marinos y fauna de ostrácodos, típicos de aguas salobres poco profundas. En la secuencia superior sólo se han encontrado distintos tipos de ostrácodos, lo que caracteriza un medio más inestable afectado por cambios de salinidad y profundidad.
Así, los profesores Serrano y Guerra-Merchán aseguran en su trabajo que «algunas muestras tomadas de esta secuencia superior contenían escasos foraminíferos planctónicos y bentónicos, lo que podría sugerir el establecimiento esporádico de condiciones marinas casi normales en el Mediterráneo occidental al final del Messiniense».
El citado trabajo de investigación se ha publicado recientemente en las revistas Paleogeography, Palaeoclimatology y Palaeoecology.
La Hoya
La zona en la que se han hallado los restos fósiles es conocida como la Hoya de Málaga, una depresión formada por la confluencia de los ríos Guadalhorce y Guadalmedina y sobre la que se extiende la ciudad de Málaga así como las Marismas del Guadalhorce, declarada Paraje Natural por la Junta de Andalucía por ser una zona que aún conserva gran parte de sus características primitivas.
