Cómo combinar un bello jardín con el ahorro de agua

Tener un jardín en el hogar y desear que tenga el mejor aspecto posible, sacando el máximo partido al espacio verde, implica conocer las mejores formas de cuidarlo. Lo mismo ocurre con las plantas.

¿Cómo ahorrar agua?

¿Cómo ahorrar agua?

El agua desempeña un papel fundamental en el cuidado de ambos elementos, de ahí que lo ideal sea conocer las mejores técnicas y trucos, que permitan hacer un uso responsable del líquido elemento en áreas exteriores.

Vamos a conocer tácticas que permitan un mejor uso del agua y algunos ejemplos de plantas que sean más resistentes a la sequía.

  • A la hora de plantear la limpieza de la zona de jardín, es aconsejable intentar priorizar el uso de una escoba, en lugar de una manguera, para limpiar el suelo o recopilar las distintas hojas secas que hayan caído.
  • Si el jardín está compuesto por macetas o zonas pequeñas, es preferible realizar el riego directamente a mano, usando regaderas pequeñas y pulverizadores. En caso de ser necesario el empleo de una manguera, se recomienda que disponga de boquilla, para poder controlar el riego.
  • Si existe una mayor amplitud de terreno, que haga necesario el empleo de aspersores, estos deben programarse de forma eficiente, teniendo en cuenta las indicaciones del fabricante, para obtener el mejor resultado.
  • Durante las horas centrales del día, la temperatura es siempre más elevada, por lo que el agua se evapora con mayor rapidez. Por ello, resulta aconsejable llevar a cabo la tarea de riego por la noche o a primera hora de la mañana, para aprovechar el agua de la forma más eficiente posible.
  • Para poder lograr una mayor retención de la humedad en el jardín, frente a las temperaturas elevadas, es aconsejable emplear la técnica del acolchado, que consiste en echar por encima de la tierra materiales orgánicos, como pueden ser paja, astillas de madera u hojas secas.
  • Aprovechar la posibilidad de reutilizar el agua. Una opción es llevar a cabo la recogida de agua de lluvia, mediante cubos y palanganas. Otra alternativa se encuentra en el segundo uso del agua empleada en la cocina (cocción de vegetales, limpieza de fruta); aunque es importante que esa agua se haya enfriado y que no contenga aditivos, como sal o bicarbonato.

Si se desea tener un jardín florido, pero al mismo tiempo se busca usar un mejor empleo de agua, existen plantas de exterior que necesitan muy poco riego. Hay opciones que tienen tonalidades más secas, como el “miscanthus”, pero también es posible encontrar notas de color, como la lavanda, el romero o la salvia. Son solo algunas, ya que existe una gran variedad: adelfa, abelia, margarita, etc.

Empleando los trucos adecuados y la vegetación correcta, conseguir un hermoso jardín no tiene que ser incompatible con el ahorro de agua.