El informe, de carácter confidencial y dirigido a la viceprimer ministra búlgara, Meglena Plugchieva, se filtró a través de la prensa local, que informó de que dos hombres de negocios, Lyudmil Stoykov y Mario Nikolov, habrían llevado a cabo estafas con proyectos ficticios a través del programa comunitario SAPARD.

Stoykov y Nikolov fueron arrestados hace un año y medio acusados de robar 7,5 millones de euros a través del SAPARD, aunque fueron puestos en libertad sin ser juzgados.

Además, según los medios búlgaros, el informe de la OLAF indica que sendos empresarios financiaron la campaña presidencial de Parvanov, que fue reelegido a finales de 2006.

El documento del organismo comunitario asegura también que los dos empresarios "poseen de más de cincuenta compañías, acciones en varias empresas europeas y en paraísos fiscales, son socios del ex viceministro de Asuntos Exteriores y probablemente gozan de buenos vínculos con el poder Ejecutivo del país".

El ex viceministro al que alude es Feim Chaushev, quien dimitió a finales de abril tras revelarse que poseía doble identidad y que utilizaba el nombre de Peter Chaushev en sus relaciones comerciales con Stoykov.

Ambos, Chausev y Stoykov, son propietarios de un complejo turístico a orillas del Mar Negro.

En declaraciones a la radio nacional búlgara, el portavoz de la OLAF, York Vuyan, manifestó desde Bruselas su malestar porque el documento se filtrara, pero confirmó su contenido.

Tras revelarse el contenido del informe, la oposición conservadora búlgara, encabezada por el líder del partido "Demócratas por una Bulgaria Fuerte", Ivan Kostov, reclamó hoy la dimisión del presidente del país.

Por su parte, el alcalde de Sofía, Boyko Borisov, declaró que el informe de la OLAF "prueba que en Bulgaria no hay Gobierno".

Las conclusiones de la Oficina comunitaria, producto de una misión de control de la UE a finales del mes pasado, salen a la luz una semana antes de que se publique el informe regular sobre el país balcánico que la Comisión Europea dará a conocer el próximo 23 de julio.

En él se prevé que el Ejecutivo comunitario critique el fracaso en la lucha contra la corrupción por parte del Gobierno búlgaro.

Éste, inquieto ante este último documento, ya anunció ayer su intención de devolver a la Comisión Europea 6,8 millones de euros del Fondo de Cohesión para dos proyectos del programa comunitario PHARE -refuerzo de instituciones, Administraciones y financiación de inversiones-.

El anuncio del gobierno búlgaro se produjo tras una serie de escándalos de corrupción y abusos sobre las ayudas destinadas al país balcánico.

En concreto, los dos proyectos de PHARE afectados por el caso prevén la construcción de carreteras hacia las fronteras con Grecia y Turquía.

Estas dos obras están entre las diez infraestructuras viarias a las que el Gobierno búlgaro congeló el pasado mes de junio la entrega de fondos comunitarios por un total de 88,4 millones de euros, debido a sospechas de corrupción en su gestión.