Diez minutos. Eso es lo que le faltó ayer al Clínicas Rincón Málaga para dar la campanada de vencer al Helvetia BM Alcobendas en su pabellón. En el minuto 50, las chicas de Diego Carrasco dominaban el marcador por 3 goles (19-22) pero se les apagaron las luces y, de ahí al final, encajaron un parcial de 8-0 que echó por tierra sus opciones de victoria.

El Clínicas Rincón Málaga llevó el peso del marcador durante casi todo el primer tiempo. Siempre fue por delante en el electrónico exceptuando un instante, tras un parcial de 4-0 local, donde el Helvetia BM Alcobendas dominaba por 10-9. Pero reaccionaron las malagueñas para llevar la contienda empatada al descanso (11-11).

La clave del marcador tan exiguo al término de los primeros 30 minutos hay que achacárselo a las defensas pero, sobre todo, a la actuación de las porteras, destacada Mihaela Ciobanu y soberbia Virginia Fernández, con 11 paradas en este primer tiempo. La buena defensa del Clínicas Rincón Málaga le permitió tener ritmo en su ataque, buscar contras, que le permitieron goles de Jennifer y Paula fusilando a la portera desde seis metros.

El problema vino con las imprecisiones en ataque. Pérdidas absurdas y consecutivas permitían correr a las jugadoras del Helvetia BM Alcobendas para igualar la contienda. Al borde del descanso se lesionó Emma Boada, que se hizo daño en el tobillo.

La igualdad se mantuvo durante los primeros 15 minutos del segundo tiempo, aunque siempre con el Clínicas Rincón Málaga con una mínima ventaja en el electrónico. El equipo malagueño supo aprovechar otro momento de inspiración de Virginia Fernández para anotar un parcial de 0-3 y ponerse con 3 de ventaja a diez del final. Y cuando todo pintaba mejor, se apagaron las luces y se terminó cayendo (27-22).