La portavoz del Gobierno y ministra de Educación, Isabel Celaá, quiso trasladar ayer, en nombre del Gobierno, su cercanía a la familia, amigos y vecinos de Julen. «Estamos asistiendo a unas horas durísimas para familiares, amigos y vecinos, quiero trasladarles la cercanía del Gobierno en estos momentos», dijo.

Así, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros de ayer viernes, Celaá tuvo unas palabras para el pequeño que cayó al pozo. Los hechos sucedieron sobre las 14.00 horas del pasado domingo. El 112 recibió un aviso de la caída de un menor de dos años por un agujero en la zona del Dolmen del Cerro de la Corona. Se trataba de un orificio de prospección para buscar agua que cuenta con un diámetro de unos 25 centímetros y una profundidad de 150 metros.

Por otro lado, los obispos españoles, reunidos estos días en un retiro espiritual, han dirigido sus oraciones al pequeño Julen. El secretario general de la Conferencia Episcopal Española (CEE), Luis Argüello, explicó en un mensaje a través de la red social Twitter, que los obispos han rezado por el niño malagueño durante los Ejercicios Espirituales que están teniendo lugar del 13 al 19 de enero.

«En unos días de retiro los obispos rezamos por Julen, por sus padres y familiares y por todas las personas que están poniendo todo de su parte para un rápido rescate. Que Dios les ayude», subrayó Argüello en el mensaje.