La Policía Nacional ha detenido a un menor de 16 años de edad, vecino de Benajarafe, como presunto autor de un delito de odio contra el párroco de esta localidad del litoral veleño. Al parecer, según había denunciado el propio cura, de origen hindú, en los últimos meses habría recibido incluso amenazas de muerte vinculadas al «color de su piel». El detonante para culminar la localización del autor de dichas amenazas habría sido la masiva manifestación vecinal, el pasado domingo, para exigir mayor presencia policial en esta parte de Vélez-Málaga.

«Damos las gracias a los habitantes de Benajarafe, Rincón de la Victoria, Torre del Mar y otros lugares que nos han apoyado en el fomento de la seguridad en nuestro pueblo y el respeto a nuestra fe, color de piel e ideología. También quiero dar las gracias por el cariño que he recibido tanto personalmente como en Facebook», señaló el propio párroco, de 37 años de edad y que responde al nombre de Ramesh Babu Gudapati, a través de sus perfiles en esta red social.

El joven detenido, a instancias del Juzgado de Menores número 2 de Málaga, permanecerá internado durante seis meses en un centro de menores, a modo de medida cautelar. Pero además pesará durante él una orden de alejamiento con la prohibición de acercarse a menos de 200 metros del párroco, después de haber incurrido en los delitos de odio y de amenazas. En compañía de otros jóvenes, incluso la víctima habría sufrido actos vandálicos en estos meses, como remarcaron los propios organizadores de la movilización de apoyo.

La Policía Nacional en los últimos días habría recopilado pruebas para saber que el menor estaba detrás de los mensajes contra el color de piel del cura y las amenazas de muerte. El joven de nacionalidad española habría proferido comentarios racistas e incluso varias amenazas.

El internamiento se desarrollará durante los próximos seis meses y la orden de alejamiento, respecto a la parroquia, se extiende a un periodo de nueve. En este último caso también se ordena la imposibilidad de que el adolescente pueda comunicarse con la víctima. En la documentación facilitada se indica que la denuncia del párroco se formuló el pasado 26 de junio en la Comisaría de Vélez-Málaga.

Ese mismo día un joven se había mostrado especialmente violento contra el color de la piel del cura y lo amenazó «con cortarle el cuello». Pero según las indagaciones, «no era la primera vez que el párroco recibía insultos racistas por jóvenes que frecuentan los alrededores de su parroquia». Habría sufrido actos vandálicos en la misma y sustracciones en su vehículo particular.

Las pesquisas han permitido la localización del menor como presunto responsable de los hechos. Ya detenido se le escuchó en presencia de su abogado y su tutor legal, puesto en libertad con cargos y citado en la Fiscalía de Menores.