Con un abarrotado paseo Balcón de Europa, el agente de la Policía Local Bernardo Cortés "Yiyi" y el empresario de bordados Francisco Bueno han agradecido públicamente las muestras de cariño recibidas ante el reto ciclista que les llevará a Santiago de Compostela y los más de 25.000 euros que ya han recaudado a favor de la Asociación Española de lucha Contra el Cáncer (AECC).

Ambos han recordado que todo ese dinero, con importantes aportaciones de la Fundación Cueva de Nerja o del Ayuntamiento nerjeño, además de las generadas por multitud de establecimientos y de particulares, parten de la venta de los 14.000 kilómetros que van a recorrer entre los viernes 6 y 20 de septiembre. La primera etapa arrancará a las cinco de la mañana de este mismo viernes desde el centro urbano nerjeño y, tras superar el puerto de Zafarraya, les llevará hasta la localidad cordobesa de Encinas Reales. "Puede que sea la etapa más dura sobre el papel, aunque luego también dependerá de la meteorología del camino que haya días más complicados", relata Bueno.

Para ninguno de los dos será la primera aventura deportiva por el Camino de Santiago, pero sí que hasta ahora no han vivido lo que representa una oleada de solidaridad de tal magnitud. Bernardo sufrió en propias carnes las consecuencias de una enfermedad como el cáncer, mientras que Francisco la sufrió en la persona de su mujer, Lucía Noguera. "Es difícil encontrar una familia que directa o indirectamente no la haya sufrido. Si no las tienes en tu casa, te espera en el recibidor. Es un problema que tenemos todos, pero gracias a la investigación ya no es sinónimo de muerte", expresa el propio Cortés, que además ejerce como secretario de la delegación nerjeña de la AECC.

Dicho colectivo atiende a enfermos y familiares no sólo del municipio axárquico más oriental, sino que también desplaza a sus voluntarios, como acompañantes, a localidades vecinas como Torrox. Asimismo disponen del servicio de los psicólogos del colectivo, que periódicamente acude desde la capital malagueña para asesorar a las familias cuando tienen que afrontar esta enfermedad. Para los dos protagonistas de este reto, inicialmente se aspiraba a recaudar 1.400 euros, un euro por kilómetro del trazado por el Camino Mozárabe y la Vía de la Plata hasta Santiago.

"Pero seguimos de récord en récord y vamos a mantener abierta la recaudación de fondos hasta que lleguemos a la Catedral de Santiago. Una vez allí tomaremos un avión para regresar a Nerja el viernes 20 de septiembre sobre las siete y media u ocho de la tarde, donde volvemos a reencontrarnos con familiares, amigos, colaboradores y representantes de nuestra asociación", matizan. La cuenta bancaria abierta para hacer los ingresos de este reto es: ES51 2103 0146 9400 3005 1359, con el concepto de Reto Nerja 2019.

Bernardo Cortés se emociona al subrayar una de las visitas más especiales que ha tenido en la presentación de este jueves a modo de despedida, la del cirujano Diego Gaitán que fue el encargado de ayudarle a superar el tumor que le fue diagnosticado. "Ha venido con su mujer y en un día tan especial como es el de su cumpleaños. Le estoy muy agradecido, al igual que a tantas y tantas familias que han venido a arroparnos", argumenta. En el caso de este agente de la Policía Local de Nerja, que ha practicado deporte de fondo durante décadas con la camiseta del Club Nerja de Atletismo, el mes de junio marcó un antes y un después. "Ahí ya me indicaron que las revisiones pasarían a ser cada dos años y fue cuando me propuse cumplir con mi promesa de ir a Santiago. Unos días más tarde se unió al reto Francisco Bueno, que tenía además una larga experiencia como peregrino", agrega.

En efecto, su compañero de aventura ya estuvo en febrero pasado en el Camino Francés y en pleno trayecto hacia Galicia incluso sufrió los efectos de la gran nevada del pasado invierno. Ahora ambos temen las etapas calurosas por Andalucía y Extremadura, así como las noches de temperaturas bajas que padecerán en Salamanca y aún más cerca de Santiago de Compostela. Pero confían en las semanas de preparación que acumulan y, sobre todo, en el soporte que representan sus hermanos (entre ambos suman más de una docena) y el resto de familiares directos, así como los cientos de donantes anónimos e instituciones que han aportado fondos para el colectivo nacional contra el cáncer.