El Centro municipal de Arte Contemporáneo de Málaga y su gestor, el empresario Fernando Francés, protagonizaron ayer buena parte del pleno, donde se aprobó la moción urgente de Ciudadanos en la que la formación naranja solicitaba al Ayuntamiento a ofrecer una explicación pública sobre la denuncia de la artista Marina Vargas en la que acusa a Francés de propinarle una bofetada en la cara. También salió adelante la moción del PP para que el espacio de calle Alemania mantenga en el futuro su actual modelo de gestión privado previa convocatoria de un concurso público.

El concejal de Ciudadanos, Gonzalo Sichar, encargado de exponer la moción, señaló en primer lugar al director del CAC como «una persona polémica». Seguidamente, criticó el notorio apoyo de Francés «al misterioso Invader», por el que está siendo investigado por la Fiscalía, así como la promoción que el cántabro realiza de su empresa de apartamentos turísticos en ferias como Art Marbella y Marbella Desing. También llamó la atención sobre cómo Francés compatibiliza «su actividad privada con su actividad pública en contra de los criterios del Consejo Internacional de Museos (ICOM) a los que dice respetar».

«No sabemos si hubo o no agresión a la artista Marina Vargas pero, como gestor de un espacio público, queremos que el Ayuntamiento aclare lo ocurrido», concluyó el concejal. En esta línea, la edil de IU-Málaga para la Gente, Remedios Ramos, destacó que Fernando Francés «es la cara pública del CAC», por lo que se mostró a favor de que se aclare lo ocurrido.

Por su parte, la concejala de Cultura, Gemma del Corral, aseguró «compartir el espíritu de la moción», aunque explicó que el PP se abstendría por prudencia, ya que aún no se conocen todos los detalles del hecho ocurrido en la pasada Feria de Arte de Santander. Finalmente, la moción fue aprobada con 17 votos a favor y 11 abstenciones, correspondientes al PP.

Gestión privada del CAC

Por otra parte, los votos del equipo de gobierno y Ciudadanos hicieron posible la aprobación de la moción presentada por el PP para continuar con el modelo de gestión actual para el CAC a través de un concurso público «con un pliego que garantice la concurrencia competitiva, que incorpore las mejoras y sugerencias que indique la auditoría realizada». Gemma del Corral argumentó el éxito de dicho modelo apuntando a las cifras de visitantes del espacio expositivo, la calidad de las exposiciones y que el cambio a una gestión pública no supondría un ahorro de los 3,2 millones que anualmente recibe el centro.

Los grupos de la oposición recriminaron a Del Corral que no les mostrase ni el estudio económico ni la auditoria a la que aludió y le recordaron que el pleno ya votó el pasado año que el CAC pasase a ser gestionado por la Agencia Pública para la gestión de la Casa Natal.