Entrevista | Javier Castillo Escritor y Premio Málaga de Cultura 2023

"Creo que mis gustos encajan con los de la gran mayoría de la gente"

El escritor malagueño Javier Castillo vive un momento dulce, convirtiéndose en un superventas a nivel mundial y con adaptaciones televisivas de sus novelas, lo que le han hecho merecedor del Premio Málaga de Cultura 2023

El escritor Javier Castillo, Premio Cultura 2023  de La Opinión de Málaga.

El escritor Javier Castillo, Premio Cultura 2023 de La Opinión de Málaga. / Álex Zea

Si alguien sabe de éxito editorial en nuestro país es Javier Castillo, escritor malagueño que acumula tras seis libros, más de dos millones de ejemplares vendidos, lo que le hace acreedor del Premio Cultura 2023 de La Opinión de Málaga.

¿Qué significa para usted este reconocimiento que le otorga La Opinión?

Siempre es un honor y un regalo. Me siento arropado y que un periódico como La Opinión, al que sigo en la actualidad y que leí mucho en mi época universitaria, se haya fijado en mi trabajo y en mí es muy gratificante.

¿Cómo recuerda aquel año 2016 en el que pasó del anonimato a ser un escritor con millones de libros vendidos con El día que se perdió la cordura?

Fue surrealista y muy sorprendente. Yo pensaba que lo que había vendido en la red era un poco por casualidad, que el destino y el algoritmo de Amazon habían empujado a ello. Pero de repente, cuando se publicó en papel fue una auténtica barbaridad. Recuerdo que me llamaba mi editor cada dos días para decirme que sacaban nuevas ediciones y todo se convirtió en una locura. Recuerdo cuando hicimos la segunda firma del libro, que fue en Murcia, y se plantaron allí más de mil personas. Fue todo muy apoteósico. Hoy en día, cuando voy por la calle y me piden una foto sigo pensando que esto es un sueño increíble.

¿Cuál es la receta para que millones de lectores lean sus libros?

Esa es una buena pregunta que yo me hago cuando publico un libro. El truco está en escribir el libro que a ti te gustaría leer. Creo que mis gustos encajan con los de la gran mayoría de la gente, y al final, cuando yo escribo para mí, tengo la suerte de que a muchísima gente le gusta. Luego hay elementos que siempre pasan desapercibidos: acertar con el tema, atrapar el interés desde el inicio, ser capaces de mantener la tensión en todo el relato. Hoy en día vivimos bombardeados por muchas cosas: publicidad, redes sociales, aplicaciones, notificaciones en el móvil, mensajes, etc. y si un libro no es capaz de mantenerte pegado a sus páginas, lo abandonas. A mí me pasa. Yo dejo de leer libros porque no consigo entender ese punto original que te engancha y eso, yo creo, es crucial hoy en día escribas el género que escribas.

¿Cómo es el proceso de escritura de una de sus novelas? ¿Tarda mucho? ¿Es un proceso largo?

Yo tardo bastante. Si hablamos de planificación hay dos tipos de escritores, los que se documentan y los que directamente se lanzan a escribir. Yo primero planifico la trama que quiero contar. Elaboro muy bien ese mapa conceptual de toda la trama y luego me pongo a investigar todos los huecos de esa trama que no conozco. De este modo voy desarrollando el argumento, como una especie de puzzle, y una vez que ya tengo el puzzle muy montado, muy construido, cuando veo que los pilares están bien y son muy sólidos, ya es cuando me lanzo a escribir. El proceso de escritura suele ser de ocho o nueve meses, más o menos. En la planificación suelo invertir 4 cuatro meses.

Me llama la atención que la acción de sus novelas se desarrolla en Estados Unidos. ¿Hay algún motivo?

Empezó un poco por inercia. Ha sido un poco aleatorio. El inicio de mi primera novela era sorprendente, con un hombre paseando con la cabeza decapitada de una mujer. Me pareció un inicio tan chocante y además tenía ya toda la trama construida y era tan difícil de seguir, que no quería añadir un componente local porque corría el riesgo de despistar mucho la historia. Pensé que lo que estaba narrando podría pasar fuera, pero aquí en España no podría pasar algo así.Y a la gente le gustó. Y de repente en el segundo libro que era continuación del primero, tenía que suceder la acción en el mismo lugar. Luego, en el tercer libro, quería escribir una trama sobre el mundo del cine, sobre el mundo del guión, que a mí me fascina, y lo llevé al Hollywood de los años 70. Con La chica de nieve, quería lanzar una crítica al mundo del periodismo, más concretamente del periodismo sensacionalista y para ello cree un periódico ficticio en Estados Unidos porque no quería situarlo en un medio local concreto, en el que quería ubicar la figura de una periodista universal, representante del buen periodismo. La verdad es que ya todo el mundo espera que mis novelas estén fuera, pero también tengo alguna novela en el tintero que no será solo en Estados Unidos, sino que la situaré en también en Europa.

¿Qué opina de que la valía de un escritor se mida por los libros que vende?

No tiene nada que ver. Yo no creo que la gente confunda éxito económico con calidad. Por ejemplo, yo vendo muchos libros, pero disfruto de infinidad de títulos que no se han vendido tanto. Lo bueno del mercado editorial actual es que es gigantesco y hay libros para todo el mundo. Siempre encuentras lo que vas buscando. Yo tengo la suerte de que los historias son muy universales y gustan a muchísima gente en muchísimos países, pero también hay libros que son más pequeños en el sentido de que las tramas no son tan universales, son más íntimas y con más perspectivas, y ese libro también funciona, pero a menor escala. Pero eso no quita que un libro sea mejor que otro. Al final, hay libros que pueden haber vendido solo 100 ejemplares y marcar la vida de esos 100 lectores y convertirse es un libro formidable. Al final, se trata de eso, de que el libro llegue a la persona que tiene que llegar en el momento que tiene que llegar, que lo lea y lo disfrute. Entonces ese libro ya será un éxito.

Javier, ¿qué libros lee?, ¿qué tipo de literatura le gusta? ¿qué autores españoles y extranjeros son sus favoritos?

Leo un poco de todo. De los que he leído recientemente me ha gustado mucho el último de Easton Ellis y El último verdugo, de Tony Hill. También Leo a Blue Jeans porque me gusta leer literatura juvenil para ver si se me escapa algún tema de los que aborda, o la novela romántica de Elizabeth Benavent. Intento leer de todo.

¿Por qué cree que millones y millones de lectores en todo el mundo leen novela negra y de género policíaco?

Yo creo que el ser humano es curioso por naturaleza y nos llama mucho la atención, nos fascina, todo lo que es distinto a nosotros. El 99,99% de la población somos buenas personas y ¿qué ocurre? que nos llama la atención cuando vemos un asesinato o algo similar que nosotros jamás haríamos y por eso queremos descubrir cómo alguien es capaz de llegar a ese extremo, y la novela negra tiene ese componente, fomenta esa curiosidad que tanto nos gusta y por esto el género negro y policiaco tiene tantos adeptos.

En el Día de Acción de Gracias sale para el mercado anglosajón La Chica de Nieve, libro que ya se ha publicado en prácticamente todo el mundo, ¿da vértigo?

Yo creo que me quedan diez países todavía en los que el libro esté presente (risas). Claro que da vértigo pensarlo. El mercado británico y de la Commonwealth siempre suele ser el último mercado, el más difícil para los autores españoles. Mi editorial es la editorial más grande de Reino Unido, y soy el primer autor español que ha publicado en sus100 años de historia. El mundo del libro es muy particular y solo espero que funcione igual que en el resto de mercados.