María Isabel Jiménez-Alfaro, titular del juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 2 de Torrox, dictó el pasado 22 de junio un auto por el que prorroga en otros dos años la situación de prisión preventiva que sufre H. B., procesado por haber matado a puñaladas a su ex novia, una joven argentina llamada Cecilia Natalia Coria, en el Balcón de Europa de Nerja el 28 de septiembre de 2008. El imputado, nacido en Marruecos, ha estado un bienio privado de libertad, en concreto desde que fue detenido.

Según consta en el auto, «en el caso que nos ocupa, resulta innegable la gravedad del delito», explica la magistrada, para, a continuación, detallar los cargos que penden sobre el encausado: asesinato, quebrantamiento de condena, malos tratos habituales, amenazas y malos tratos del artículo 153 del Código Penal, lo que también se detalla en el auto de procesamiento dictado el 23 de septiembre de 2009.

«A mayor gravedad más intensa cabe presumir la tentación de huida y mayor será el perjuicio que, en caso de materializarse la fuga, sufrirían los fines perseguidos por la Justicia», indica la juez.

No sólo siguen en vigor los argumentos esgrimidos en septiembre de 2008 para enviar a la cárcel al procesado, sino que, incluso, «se han concretado de forma más detallada los indicios de criminalidad» a lo largo de la investigación, indica Jiménez-Alfaro, quien además pone en relación con ello el alto riesgo de fuga existente en este asunto.

Por ello, se prorroga en dos años la prisión preventiva, también debido a que «la instrucción se ha prolongado por causas ajenas al juzgado, quedando pendiente, a día de hoy, un último informe que será emitido por el Instituto Nacional de Toxicología sobre cotejo genético de ADN del imputado con los perfiles obtenidos a partir del cuchillo supuestamente utilizado por H. B. para cometer el asesinato», aclara la magistrada.

Asesinato

Los hechos sucedieron el 28 de septiembre de 2008 cuando la joven, de 25 años, estaba trabajando en una cafetería y el presunto agresor, que tenía una orden de alejamiento, presuntamente le asestó varias puñaladas que le ocasionaron la muerte. Algunos camareros intentaron ayudar a la mujer, arrojándole sillas al hombre, por lo que éste huyó.