Algunos con ojeras, otros con cara de cansancio, pero todos con buena apariencia en general y demasiado arreglados como para haber dormido fuera de su casa una noche entera. Los alcaldes del PP y portavoces de municipios de menos de 25.000 habitantes encerrados desde el jueves en la Delegación del Gobierno de la Junta no tuvieron una madrugada sencilla.
El vicesecretario del PP en Málaga, Francisco Oblaré, encabezó el encierro, con el que reclaman 16,7 millones de euros que la administración autonómica les debe. Oblaré pasó 24 horas seguidas dentro del edificio, noche incluida. «No ha sido fácil», contaba ayer, debido a que tuvieron que dormir dentro de la sede de la Junta que no está preparada para pernoctar. De hecho, la sala de prensa se convirtió en un improvisado dormitorio.
La noche fue larga y cada político la pasó de una forma distinta. «Algunos han estado jugando a las cartas, otros a los dados y otros trabajando», comentó Oblaré. Por la mañana, algunos de los encerrados vestían las mismas ropas que la noche anterior y el aseo no fue del todo sencillo. «Por la mañana algún compañero fue a comprar toallitas, desodorante y diferentes avíos para la higiene», contó el dirigente popular.
Las reivindicaciones del vicesecretario continuaron ayer en la misma línea que el día anterior. La protesta está sustentada en la deuda de la Junta de Andalucía con los municipios pequeños (de menos de 25.000 habitantes). El montante asciende, según el PP, hasta 16,7 millones de euros.
La visión de la Junta es diferente y el delegado del Gobierno andaluz, José Luis Ruiz Espejo, comentó que «hay más deuda de los ayuntamientos hacia el Gobierno andaluz que al revés». También defiende que «se mantendrán los fondos incondicionados que van a recibir los municipios y que en la provincia de Málaga supondrá 80 millones de euros».
En el encierro participan los primeros ediles de la mayoría de los 34 municipios donde gobierna el PP, de localidades con menos de 25.000 habitantes y de otras más grandes. Portaban carteles con los nombres de los pueblos y sus respectivas deudas y gritaban eslóganes como «si la Junta no paga, de aquí no nos vamos».
La intención de los populares es continuar encerrados hasta que «dentro de los presupuestos que la Junta prepara para el año próximo se contemple la devolución de esta deuda». Al final de la mañana se reunieron con Ruiz Espejo, tras lo que tildaron las soluciones propuestas por el socialista de «tomadura de pelo». Por tanto, continuarán con el encierro todo el fin de semana.
El delegado del Gobierno de la Junta comentó que los presupuestos de la Junta de Andalucía para 2014 «van a recoger los fondos de la Patrica, los planes de choque para el empleo y las aportaciones para los planes extraordinarios».
Encierro socialista
Pero este encierro no es aislado. En el mes de abril, fueron los socialistas y miembros de IU quienes protagonizaron una protesta similar, pero en la Diputación. Entre sus demandas, la misma petición que esta semana reclama el PP, un plan de empleo y que no se recorte en los presupuestos para los municipios de menos de 25.000 habitantes.
En aquella ocasión los socialistas pasaron una noche en el edificio de la Diputación y la situación fue similar. «Estuvimos charlando, algunos jugaron a las cartas y otras comentando la situación», según fuentes socialistas.
