­El Ayuntamiento de Málaga ha vuelto insistir en su intento de establecer en Limposam -la empresa municipal dedicada a la limpieza de edificios y colegios públicos- la llamada doble escala salarial (contratar personas con salarios inferiores a los que perciben los trabajadores ya en plantilla, pese a tener la misma categoría profesional y a realizar el mismo trabajo).

El Ayuntamiento fracasó en la primera ocasión que lo intentó, hace ahora un año, al reclamar para su implantación la complicidad de todos los sindicatos que operan en Limposam y encontrarse con el rechazo frontal de la CGT, lo que impidió su acuerdo. El resto de sindicatos: UGT, CCOO y USO, sí se mostraron a favor.

Ahora, un año después, el Ayuntamiento y la dirección de la empresa han vuelto a plantear la implantación de este sistema y han vuelto a encontrar el rechazo de CGT.

Los argumentos de la empresa y el Ayuntamiento a favor de la doble escala pasan por que la plantilla actual no es competitiva con el resto de empresas privadas del sector y por eso está perdiendo clientes y cada vez ve reducido el número de edificios a limpiar. La consecuencia es una plantilla cada vez menor al amortizarse todos los puestos vacantes. «Si queremos crecer tenemos que cambiar y ser competitivos», dicen, y eso pasaría por rebajar los costes salariales.

En su nuevo intento, el Ayuntamiento vuelve a poner como condición la aceptación por todos los sindicatos con actividad en la empresa. Pero CGT ha vuelto a decir que no.

En esta ocasión, fueron los propios afiliados y en presencia del concejal Raúl Jiménez, que aceptó acudir a una asamblea de afiliados al sindicato a explicar la propuesta el pasado fin de semana.

Propuesta de CGT. Jiménez expuso los argumentos para conseguir una plantilla más competitiva. Enfrente, el responsable de CGT en Limposam, Miguel Pacheco, explicó su rechazo sindical a la doble escala salarial basado en que es un sistema «discriminatorio». Utilizó una amplia jurisprudencia de sentencias judiciales en contra de la doble escala como sistema contrario a la igualdad laboral.

Esto permitió que la reunión se posicionase con claridad en contra de la propuesta de la empresa y el Ayuntamiento.

A su vez, la CGT ha presentado al Ayuntamiento una propuesta de «crecimiento» de la empresa que el concejal se mostró dispuesto a estudiar y a negociar.

La propuesta pasa por la creación de una nueva categoría para el personal de nuevo ingreso. Este personal de nuevo ingreso, después de tres años, tendría una equiparación progresiva a la del resto del personal fijo, según categorías.

A ello se uniría el reconocimiento de Limposam como «servicio esencial», lo que evitaría la aplicación de la ley de recortes presupuestarios en la empresa que ahora mismo impide nuevas contrataciones.

CGT plantea también la recuperación de los derechos que se perdieron en anteriores convenios, así como la reubicación inmediata del colectivo de 35 trabajadoras fijas que cubren imprevistos y ampliaciones de jornadas, así como la ampliación de jornada al personal que aún no goza de jornada completa.