Nueve años después de entrar en vigor la Ley de la Memoria Histórica y a un año de la aprobación de la Ley de Memoria Democrática de Andalucía, Málaga aún sigue repleta de símbolos franquistas en sus calles y edificios.

La oposición en el Ayuntamiento de Málaga ha vuelto a criticar con dureza la "lentitud" con la que el equipo de gobierno da cumplimiento a la retirada de esta simbología. En vísperas de la reunión de la Comisión Municipal de la Memoria Histórica, prevista para hoy miércoles, el PSOE recordó la tardanza del gobierno local en dar cumplimiento al mandato de la eliminación de estos símbolos, si bien la ley andaluza, aprobada en octubre de 2015, da un plazo de 18 meses a los ayuntamientos para cumplir dicho mandato.

Por su parte, el equipo de gobierno, consciente de esa tardanza en en vísperas de la comisión sobre la memoria histórica, anunció ayer que acaba de adjudicar por 6.000 euros los trabajos para eliminar en las próximas semanas una treintena de símbolos del franquismo.

Se intervendrá en una treintena de placas y azulejos con símbolos franquistas. Los nombres de las calles en las que se va a actuar para retirar esos símbolos de alguna de sus fachadas son la avenida de la Paloma, Canónigo Fernández de Ávila, Concejal Masso Roura, Sor Teresa Prat, Sillita de la Reina, Héroe de Sostoa, Montaña Blanca, Archidona y Barriadas Haza de Cuevas y 26 de Febrero. Los diferentes distritos municipales informarán a los propietarios de los inmuebles de su retirada.

Símbolos franquistas retirados

Estos trabajos suponen la continuación de las retiradas que se han realizado en los últimos meses, como las placas en la Barriada de Olías y Jardines de Pedro Luis Alonso, un monolito en Gibralfaro, cruces conmemorativas y placa en el Paseo Salvador Rueda (Camino Nuevo). También se ha tapado el reloj solar de los Jardines de Puerta Oscura. Por lo que se refiere al callejero, se han realizado algunos cambios como es el caso de las calles General Mola y Calle General Sanjurjo, que han pasado a denominarse, respectivamente, Calle O´Donell y Calle Escritor Enrique Llovet. En la barriada de Olías la calle Generalísimo Franco pasó a ser calle La Ópera, la calle Queipo de Llano se denomina ahora calle La Cantata y la denominada Mártires de Olías es actualmente calle La Sinfonía.

Estas retiradas son fruto los acuerdos plenarios y de los alcanzados en la Comisión Municipal de la Memoria Histórica, que volverá a reunirse este miércoles. En el orden del día de esta comisión figura un acuerdo con la Universidad de Málaga para realizar diversas actuaciones entre las cuales destaca una investigación que permita conocer la identidad de las personas que dan nombres a algunas calles. Este rastreo tendrá como finalidad localizar posibles denominaciones de militares de la época del franquismo para poder ser retirados del callejero.

Además se ha remitido al Boletín Oficial de la Provincia el acuerdo que supone la retirada de todas las distinciones municipales que se le habían concedido a Francisco Franco, algo a lo que se opuso al PP, alegando que dicha publicación supondría un coste de 4.000 euros a las arcas municipales y que ahora ha tenido que aceptar tras el acuerdo plenario del 30 de junio.

Manuel José García Caparrós

Por otra parte, el Ayuntamiento ya ha iniciado los contactos para tramitar y trasladar a la Junta la incorporación como ´Lugar de la Memoria Histórica´ la esquina donde murió Manuel José García Caparros, el edificio de la Aduana y el lugar donde se levantaba el antiguo cuartel de la Guardia Civil del pasillo de Natera. Igualmente, en breve serán colocadas placas conmemorativas, en dos lugares claves de la Memoria Histórica: en la antigua Cárcel de Mujeres (actual cuartel de la Policía Local) y en el Cementerio de San Rafael.