­Licenciada en Publicidad y Relaciones Públicas por la Universidad de Málaga, lugar en el que nació, Almudena Muñoz se incorporó en 2013 a BlaBlaCar cuando aún no contaba con más de un centenar de empleados. Asegura que si tuviera que resumir todos estos años en una sola palabra esa sería experiencia. El próximo 27 de abril aborda esto y mucho mas en el encuentro eWoman, organizado por La Opinión de Málaga, en el Museo Ruso. Los interesados pueden acudir de manera gratuita tras previa inscripción en la web https://mas.laopiniondemalaga.es/ewoman/2017/

Una idea tan sencilla como es compartir vehículo para ahorrar gastos y, sin embargo, hasta hace siete años no había triunfado como negocio. ¿Cómo surge la idea?

La idea surge en Francia, de manos del fundador Frédéric Mazzella, cuando este intentaba volver a casa una Navidad. Fred se encontró que todos los trenes estaban llenos y pensaba que esa Navidad la iba a tener que pasar separado de los suyos. Finalmente su hermana condujo los 500 kilómetros que le separaban de disfrutar las fiestas con los suyos. Por el camino pudo observar que la mayoría de los coches que iban en la carretera iban con sólo un ocupante, ¿vaya desperdicio de recursos, no? Y así nació la idea.

BlaBlaCar cuenta con 40 millones de usuarios en el mundo, ¿cuál es la clave?

BlaBlaCar es una propuesta innovadora que aporta valor a todos: el conductor reduce el gasto que supone viajar en coche, mientras que el pasajero tiene acceso a una movilidad más asequible, directa y social. Para poder desarrollar esta idea la clave ha sido, sin duda, la capacidad de generar confianza a escala masiva a través de los diferentes recursos tecnológicos y humanos que BlaBlaCar ha desarrollado.

Publicar viajes, buscar combinaciones posibles para ir a algún punto...Todo se lleva a cabo a través de la página web o la aplicación. ¿Hubiera sido posible este modelo de negocio sin el mundo online?

Obviamente, sin internet, sería imposible entender BlaBlaCar como lo conocemos hoy en día, dada la inmensa cantidad de datos que procesamos y la escala que ha conseguido. De hecho, a través de la tecnología hemos podido cambiar la escala de algo que, si miramos años atrás, en Alemania existía desde los años 80. En las oficinas de la empresa estatal Mitfahrzentrale, la gente acudía a inscribir y buscar sus viajes para viajar compartiendo coche.

Internet es un escaparate para contar experiencias positivas pero también negativas y la plataforma no se libra. ¿Es el universo digital un arma de doble filo para las empresas?

Internet abre un mundo de posibilidades y como tal, hay más espacio para todo. Pero si algo otorga es oportunidades. Claro que si alguien tiene una mala experiencia con una compañía lo va a decir, pero también quienes las tienen buenas. Sin ir más lejos, el 98 por ciento de las opiniones que los usuarios de BlaBlaCar deja a sus compañeros de viaje son buenas o muy buenas y eso ha contribuido enormemente a nuestro crecimiento.

Su cargo dentro de esta empresa está relacionado con la coordinación de eventos y gestión de apariciones en medios de comunicación y encuentros. A muchos le sorprenderá pensar que hay algo más allá de la red de conductores y pasajeros. ¿Qué trabajo hay detrás de todo esto?

Hemos preguntado a nuestros usuarios cuáles son nuestras tareas principales y han respondido que conectar personas, generar confianza y comunicar sobre el coche compartido para que más gente lo use. Detrás de esas misiones hay mucho trabajo, de desarrollo tecnológico, marketing, comunicación, prensa, atención al usuario, finanzas, etc.

¿Cómo resumiría su trayectoria en la empresa durante estos tres años y medio?

Dicen que un año en una startup computa como cinco en una empresa tradicional. Si tengo que resumir el tiempo que llevo aquí en una sola palabra, elegiría experiencia.

El encuentro eWoman está enfocado a conocer la experiencia de mujeres líderes en el entorno digital, ¿son habituales en su día a día o aún hay que trabajar en ello?

Trabajo en un entorno en el que las mujeres estamos en igualdad de condiciones que los hombres. Pero soy consciente de que esto es algo en lo que aún muchas empresas tienen que trabajar.

¿Cómo afronta el futuro BlaBlaCar?, ¿hay miras de ampliar los servicios que ofrece o su modelo está enfocado en exclusiva a compartir vehículo?

Somos una empresa relativamente joven y nuestro futuro inmediato pasa por consolidar lo conseguido hasta ahora: presencia en 22 países y más de 40 millones de usuarios. Por supuesto, estamos constantemente innovando y miramos al futuro buscando nuevas funcionalidades que lanzar, pero de momento no podemos anunciar nada.

Hay colectivos que piensan que esta actividad debería estar regulada, ¿cómo se gestiona este punto que persigue a BlaBlaCar desde sus inicios?

Es un debate que nos sorprende mucho. Por dos motivos: el primero, que nuestra actividad ya está regulada, en España y en toda Europa, por la Directiva de Servicios de la Sociedad de la Información. Y el segundo, porque España es el único país del mundo donde hemos vivido este tipo de críticas o la amenaza de cierre tras la demanda presentada por la patronal de empresas de autobuses. Afortunadamente, el pasado mes de febrero el juez desestimó dicha demanda y explicó, como hemos sostenido siempre, que nuestra actividad es legal en España y, efectivamente, está regulada por la Directiva de Servicios de la Sociedad de la Información.