El edil Sergio Brenes, del Grupo Municipal Socialista en el Ayuntamiento de Málaga, denunció ayer que la Sociedad Municipal de Aparcamientos y Servicios (Smassa) cuenta con dos altos cargos directivos, su gerente, Raúl López, y un jefe de servicio, Emilio Zamarriego, pese a que la ley solo le permite contar con uno.

No en vano, según el informe del interventor sobre la Cuenta General de 2016, emitido en julio, la sociedad aún no ha regularizado esta situación, tal y como denunció el PSOE. En ese estudio, el alto funcionario municipal afirma: «En relación a la verificación del cumplimiento de lo dispuesto en la disposición adicional segunda de la Ley 7/1985, de 2 de abril, reguladora de las Bases del Régimen Local, respecto a los contratos mercantiles y de alta dirección, el auditor afirma que la sociedad no ha regularizado su situación», por lo que «sobrepasa el número máximo de contratos mercantiles y de alta dirección».

Limitación de altos directivos

Fue la Ley de Racionalización de la Administración Local, impulsada por el PP en diciembre de 2013, la que impuso, al albur de la crisis, el recorte de los cargos de confianza en los consistorios, y, según esa norma, explicó Brenes, a Smassa le correspondería un solo cargo directivo y no dos. Asimismo, la Ley de Bases da potestad al pleno para establecer, entre otros aspectos, «la estructura organizativa, con fijación del número mínimo y máximo de directivos» de las sociedades de naturaleza pública.

Brenes apuntó que esta situación ha sido denunciada por el PSOE y aprobada por el pleno municipal hasta en tres ocasiones desde el año 2014, pero, pese a ello, el «PP mantiene una situación irregular». En julio de 2014, se estableció por el pleno el número de altos directivos en las sociedades. «La Ley de Racionalización establece una serie de requisitos para estas empresas y entre ellas está la del número máximo de contratos de alta dirección. Smassa, según el pleno, sólo puede tener uno, pero cuenta con dos: Emilio Zamarriego, desde 2000, y Raúl López, nombrado por el PP tras las elecciones municipales de 2015, una vez diseñado el organigrama municipal, gerente de la sociedad», recalcó el edil, quien insistió en que, pese a haberlo denunciado en varias ocasiones, «todo sigue así».

«Esta es una situación anormal, ilegal, irregular», dijo Brenes, quien insistió en que al PSOE le da igual lo que haga Smassa en relación a la persona elegida para el despido, pero «debe hacerse». «Se han saltado lo que dice también la Secretaría General del Ayuntamiento y la novedad es que ahora, en la Cuenta General de 2016 que se emitió a mediados de julio, el interventor establece que la auditoría externa ha detectado la contratación irregular de dos personas en puestos de alta dirección en la empresa», reflexionó Brenes, para quien es «increíble» que, tres años después, «el PP no dé cumplimiento a esas mociones». «No sabemos quién, pero uno de los dos sobra. Además, la ley dice que los contratos de alta dirección pueden ser cesados por quien los ha nombrado. No son funcionarios, no es personal laboral, son altos directivos nombrados a dedo, cargos de confianza del PP», aclaró. «Esto es algo que no ocurre en el resto de empresas del Ayuntamiento y se sigue manteniendo en contra del criterio de los habilitados nacionales, el secretario general y el interventor, así como del pleno. Del todo, se está incumpliendo la ley», concretó Brenes.