El gabinete de estudios del BBVA prevé que el PIB de Andalucía crezca un 2,7% en 2018 y se mantenga en un inercia "sólida" de alrededor del 2,5% en 2019, con un crecimiento del empleo en estos dos años que podría rondar los 190.000 empleos en la región y un tasa de paro que bajaría al 19,8% de la población activa en ese mismo horizonte (todavía tres puntos por encima del nivel precrisis). El informe 'Situación Andalucía' ha sido presentado este lunes en Málaga por el economista jefe para España de BBVA Research, Miguel Cardoso, y el director de la Territorial Sur de BBVA, José Ballester. En 2017 la economía de Andalucía experimentó un crecimiento del 2,7%, continuando la tendencia de crecimiento observado en 2016 (2,8%).

Los responsables del estudio han reconocido su "preocupación" por la convulsa situación política de los últimos meses aunque han señalado que la crisis catalana no ha tenido de momento un impacto excesivo sobre la marcha de la economía. Así, calculan que el PIB catalán restará siete décimas a su crecimiento pervisto en este 2018 por estas cuestiones, un porcentaje que en el caso de Andalucía se quedaría en apenas un par de décimas. En cuando a la llegada de Pedro Sánchez a la presidencia del Gobierno tras la moción de censura a Mariano Rajoy, Cardoso ha afirmado que todavía es muy pronto para poder hacer un pronóstico. En cualquier caso, ha dicho que puede ser "limitado" ya que la perspectiva de aprobación de los Presupuestos Generales del Estado ayudaría a reducir un posible impacto negativo y asegurarían la política económica.

Pese a las buenas expectativas económicas, el BBVA advirtió de que la recuperación del empleo no se está produciendo por igual en todas las zonas de Andalucía. Son las áreas costeras, de la provincia de Málaga y Almería sobre todo, las que vienen mostrando mayor dinamismo. El estudio no ofrece datos a nivel provincial, pero los expertos dan por descontado que el crecimiento del PIB en Málaga estará por encima de la media andaluza.

Un efecto colateral puede ser un posible aumento del nivel salarial de los trabajadores, debido a que la dinamización de la actividad está provocando una mayor demanda de personal por parte de las empresas. «Es probable que la recuperación de salarios se pueda producir de forma anticipada en la provincia de Málaga, donde la reducción del paro ha sido más intensa», apuntó Cardoso.

Aunque a finales de 2019 se espera recuperar el nivel de PIB absoluto y per cápita previo a la crisis, el empleo estará todavía por debajo del máximo alcanzado en la anterior época expansiva y la tasa de paro estará por encima de la de entonces.

Turismo y construcción

El responsable de informes destacó el buen comportamiento de las exportaciones y del sector turístico, aunque advirtió de que puede producirse una reducción del flujo de turistas hacia áreas como la Costa del Sol debido, por un lado, al «reciente incremento en precios» de los hoteles y a la mejora en la percepción de seguridad en algunos de los principales destinos competidores.

«Esta pérdida relativa de competitividad puede afectar negativamente las visitas de turistas a Andalucía», comentó. Para Cardoso, el sector turístico debe seguir transformándose para dirigirse a un turismo de «mayor calidad y valor añadido» que hagan «consistente» esa subida de precios.

También se resaltó el buen comportamiento del sector de la construcción, que «hasta ahora venía siendo un lastre» de la economí andaluza y que ahora está aumentando su nivel de actividad y de empleo. En los próximos tiempos puede convertirse, a su juicio, en una de las grandes alternativas al turismo como motor de empleo.

Según las previsiones de BBVA Research, la economía andaluza se verá favorecida por el entorno exterior, que impulsará las exportaciones y la inversión productiva. Sin embargo, el incremento de la demanda interna será menor que en años anteriores, con incertidumbres relacionadas con el alza de los precios del petróleo, la posible subida de tipos o la prima de riesgo

«Entre los factores que explican lo anterior destacan el menor impulso de la demanda privada y la pérdida de tracción de los vientos de cola que venían impulsando la actividad, ya que no hay bajadas adicionales de tipos de interés y el precio del petróleo remonta», apuntaron

En este escenario, los responsables de BBVA Researh afirmaron que todavía persisten algunos riesgos para la economía de Andalucía. «En el entorno exterior, se mantiene la incertidumbre en torno al posible auge de tensiones geopolíticas, o de medidas proteccionistas, que limiten la recuperación del mercado global. En este sentido, habrá que seguir con atención el aumento del precio del petróleo que reduce la renta disponible de las familias y afecta la competitividad de las empresas andaluzas», dijeron.

Además un eventual aumento en el coste de financiación en forma de subida de tipos de interés por parte del Banco Central Europeo, «sería negativo para la economía andaluza, siendo una de las comunidades más expuestas como consecuencia del nivel de apalancamiento que todavía se observa». La pérdida de competitividad en el sector turístico puede presentar una barrera para el crecimiento del sector, añadieron.