Más dinero para el personal investigador, para su formación, desarrollo de sus proyectos, asistencia a congresos o estancias en el extranjero. Todas las partidas relacionadas con la investigación, y que se enmarcan en el 'I Plan Propio de Investigación y Transferencia', aumentan hasta un presupuesto total de más de 3,1 millones. Toda esta información al detalle fue conocida ayer por el Claustro universitario, reunido en sesión ordinaria.
El citado dinero, 3.173.000 euros en concreto -casi 800.000 euros más que el año anterior-, se utiliza para el desarrollo de la estrategia de la Universidad en materia de investigación, mediante la aportación de recursos propios que financien las diferentes ayudas ofrecidas al PDI, con el objetivo de potenciar la carrera investigadora de los miembros de la UMA, incentivar los programas de concurrencia competitiva a nivel internacional, nacional y andaluz e impulsar los procesos de transferencia de I+D.
El vicerrector de Investigación, Teodomiro López Navarrete, presentó ante el Claustro la evolución de este primer plan propio, «que arroja unas cifras muy optimistas con vistas al futuro de la investigación, especialmente si se compara con los fondos y los datos que se desprenden de ejercicios anteriores». Así, destacaron que en 2017 se destinó a ayudas para la incorporación y formación de personal investigador algo más de un millón de euros, el doble que en 2015.
En cuanto a las ayudas que han percibido los beneficiarios, el I Plan Propio de Investigación y Transferencia prevé casi 2,4 millones, lo que supone un incremento del 253 por ciento con respecto al dinero establecido en el III Plan Propio de Investigación, que destinó 674.000 euros, explicaron a través de un comunicado.
Otras cifras destacables radican en el dinero recibido por los investigadores para, entre otros, asistir a congresos -264.000 euros en 2018, un 52 por ciento más que en 2015-; estancias de investigadores de centros extranjeros en la UMA -47.000, un 418 por ciento más- o la preparación de proyectos internacionales, con 18.672 euros el año pasado frente a los 12.600 de 2015.
En relación con las ayudas para la movilidad y la difusión de la actividad investigadora, el I Plan de Investigación y Transferencia tiene estipulados 940.000 euros, la segunda inversión más importante de este proyecto.
Por otro lado, el Claustro conoció la propuesta de directrices generales de la UMA en materia de Titulaciones Propias, expuesta por el vicerrector de Posgrado, Gaspar Garrote, que desgranó el planteamiento de la UMA en materia de enseñanzas propias, la formación continuada. Una formación que, en palabras del rector, José Ángel Narváez, «conforma una de las políticas estratégicas de esta universidad junto a la investigación, la transferencia y la innovación».
Por otro lado, la sesión claustral, celebrada en Ciencias de la Salud, se inició con el informe del rector, quien se refirió a la situación de huelga en que se encuentran los docentes interinos y aseguró que la política de su equipo de gobierno está encaminada a evitar el trabajo precario, para lo que se aprueban plazas en los consejos de gobierno, encaminadas a la erradicación de la figura del profesor sustituto interino y se promocionan las distintas escalas docentes.
Sobre infraestructuras, Narváez hizo hincapié en los inconvenientes que conlleva la adaptación a la normativa europea de la Ley de Contratos y se refirió a las distintas obras, con la buena marcha de la futura Facultad de Psicología y el parón que ha experimentado la reforma de Filosofía y Letras por la referida Ley de Contratos.
