El parque de ocio vuelve a su actividad después de que el pasado mayo fuera totalmente calcinado. La empresa, que originalmente abrió sus puertas en 2017 en el Polígono Santa Barbara, ha sufrido una intensa reconstrucción para poder recuperar el gran espacio del que gozaba, siendo en su momento el parque de trampolines más grande de España.

A pesar de lo ocurrido el pasado mes de mayo, los responsables de BoingJump decidieron poner en marcha el acondicionamiento del parque para volver a ofrecer diversión en la misma ubicación, pero ahora en el número 38 de calle Tucídides.

Las nuevas instalaciones de 3.000 metros cuadrados, cuentan con una amplia zona de cafetería y cumpleaños, además de una nueva atracción para los más pequeños con una cascada de toboganes.

La intención es que vuelva a ser un parque cerrado único de entretenimiento familiar y enfocado a niños, jóvenes y adultos.