La compañía de patinetes eléctricos de uso compartido Lime, que llegó a Málaga el pasado mes de noviembre, asegura que ha alcanzado una red de 50 puntos privados repartidos por la ciudad para poder estacionar y recoger en el interior de los mismos los vehículos de movilidad personal que alquilan por minuto. En Málaga tienen ya más de 100 patinetes.

De esta manera, explica la empresa, "se evita la ocupación del espacio público y se ahorran molestias a los vecinos de la ciudad". Entre los establecimientos se encuentran supermercados, gimnasios, restaurantes, hoteles, comercios y tiendas.

Para el director general de Lime en España, Álvaro Salvat, “la operativa adoptada por la compañía en Málaga demuestra nuestra capacidad para adaptarnos a las particularidades de cada ciudad, compaginando los deseos expresados por las autoridades municipales locales con las necesidades de movilidad limpia y sostenible que demandan los ciudadanos de la ciudad”.

Asimismo, Salvat considera que, “a pesar de que la compañía prefiere operar punto a punto es plenamente consciente de los deseos expresados por los responsables del Ayuntamiento de Málaga y apuesta por construir con los mismos unas relaciones fluidas y a largo plazo, ya que Málaga necesita alternativas de movilidad sostenible y Lime es ya una realidad de transporte entre los malagueños". Así, indica que "en la ciudad cabemos todos menos la contaminación”.

Más de 6.000 usuarios

Desde que Lime comenzó a operar en Málaga han conseguido 6.200 usuarios registrados en su app, que han realizado más de 15.000 viajes por la ciudad, afirman. Estas cifras "demuestran la gran demanda social existente para alternativas de transporte sostenible, complementarias al transporte público".

En este sentido, destacan que en una encuesta realizada para Lime entre 1.500 ciudadanos repartidos por toda España se destacó que el 50 por ciento de los usuarios de patinete entrevistados optarían por volver a utilizar el vehículo propio en sus desplazamientos por la ciudad en caso de que no existiese un servicio de patinetes eléctricos compartidos en su ciudad.

Por ello, hacen hincapié en que Lime "facilita una movilidad sostenible y encaja en el modelo de ciudad libre de emisiones que promueve el Ayuntamiento de Málaga al servir como complemento eficiente al transporte municipal en el centro de la ciudad, evitando la congestión de tráfico y liberando espacio de aparcamiento gracias a su elevado uso".

La empresa, además, cuenta con una nave logística en la ciudad que centraliza sus operaciones en materia de almacenamiento, reparación y recarga de dispositivos de movilidad urbana y dispone de un equipo local que incluye conductores y mecánicos, entre otros perfiles profesionales.

Asimismo, Lime dispone también en Málaga del apoyo puntual de los denominados juicers ciudadanos que colaboran mediante la recogida nocturna, la recarga en sus domicilios y el despliegue al día siguiente, entre otros, de los patinetes eléctricos de la compañía.