Las asociaciones de vecinos y comerciantes del distrito Este llevan años denunciando que la avenida Juan Sebastián Elcano y otras adyacentes se han convertido en vías naturales de paso para vehículos de gran peso, camiones y furgonetas en su mayoría, que se dirigen a la cementera de la Araña, en lugar de usar la autovía, con lo que conlleva en cuanto a contaminación acústica y ambiental y para la seguridad de los peatones, en una zona con colegios, institutos y densamente poblada. El Área de Movilidad del Ayuntamiento trabaja ya en una Ordenanza de Transporte Pesado para restringir el paso de estos camiones por la ciudad.

Así se desprende de una respuesta de la edil de Movilidad, Elvira Maeso, en la Comisión de Pleno en la que se tratan estos temas y a petición del grupo municipal IU-Málaga para la Gente, precisamente en relación a las quejas de los vecinos y comerciantes del Distrito Este. «Por parte del Ayuntamiento, se está trabajando en una ordenanza que regule específicamente esta temática, que permitirá alcanzar ventajas significativas en la fluidez del tráfico, el aprovechamiento de la capacidad de la red viaria, una mayor percepción de seguridad de otros modos de desplazamiento, la disminución del ruido y la mejora de la calidad de aire», dice Maeso en su intervención.

Así, explica, el 11 de agosto de 2016 tuvo lugar la primera Mesa de Debate de Transporte Pesado en el marco del Consejo Sectorial de Movilidad, constituido el 6 de abril de ese año. Los miembros de ese órgano, junto a los representantes políticos y municipales, son todos los implicados en el asunto: el Puerto de Málaga, la cementera Financiera y Minera, el Centro de Transportes de Málaga, Mercamálaga, Fetrama, Apoma, Aehma, Cem, Adisabes, los centros comerciales de más de 1.000 metros cuadrados (El Corte Inglés, Fnac, Larios Centro, Carrefour), las asociaciones del sector como Apetam, Aptm, Fratrans, Fetransa y CETM, estaciones de servicio en el viario urbano, Mahos, Fecoma y la Asociación de Vecinos de El Palo. En esa mesa, se les solicitó una serie de datos a todos los implicados y se ha analizado la información para «disponer el borrador definitivo».

«En el borrador se detallan restricciones de acceso y sus excepciones, establecimiento e horarios, dimensiones y pesos de vehículos pesados que circulan en la ciudad, definición de la documentación necesaria y temporalidad para los distintos tipos de solicitudes, integración de la ordenanza con las restricciones existentes en el Centro Histórico, todo ello -explica la concejala- con objeto de reducir la congestión de tráfico ocasionada por la circulación de vehículos pesados y por las operaciones de carga y descarga de mercancías asociadas». También se busca fomentar la participación ciudadana y lograr una mayor sensibilización.

El Área de Movilidad prepara también ciertas puntualizaciones, como un estudio del procedimiento y de los recursos necesarios para la solicitud de autorizaciones y gestión de las lista blanca, hay reuniones con el Centro Municipal de Informática y la Policía Local para establecer un procedimiento administrativo de sanción y protocolos internos y se están planificando los recursos humanos y las infraestructuras necesarias.

El Área de Movilidad, explica Maeso, ha instalado un nuevo sistema de gestión de vehículos pesados a la altura de Playa Virginia (63.369 euros de dinero europeo). Este año se instalará además otro sistema similar en la avenida Valle-Inclán, en el puente que hay a la altura de la calle Ciprés, en sentido Centro. El importe del contrato, en dos anualidades, es de 121.520 euros. «Estos sistemas permiten identificar aquellos vehículos pesados que no cumplan con la normativa establecida y gestionar las infracciones correspondientes cuando la ordenanza esté aprobada», agrega. Con la instalación de estos dos puntos, la ciudad contará con cuatro controles en accesos principales. Ya funcionan el de la avenida Blas Infante, 5, y en el 28 de Santiago Ramón y Cajal.

«Mediante la ejecución de este proyecto se busca reducir las emisiones de CO2 y los ruidos del tráfico, restringir el paso de vehículos pesados por el Centro, mejorar la accesibilidad y la movilidad y evitar el tránsito de vehículos pesados de mercancías para prevenir situaciones de congestión, disminución de la velocidad media de la circulación del tráfico motorizado y fricciones con otros vehículos», señala la edil de Movilidad.