La remodelación de la calle Carretería ya tiene fecha de inicio. Será en enero de 2020. Al menos esa es la fecha que maneja el Ayuntamiento de Málaga, que ya tiene una propuesta cerrada para cambiar la imagen de esta emblemática calle y cuyos efectos se dejarán notar en Álamos y las calles del entorno. El tráfico se reducirá a un único carril, los aparcamientos se quedarán en la mínima expresión y la Tribuna de los Pobres, una de los iconos urbanos de Málaga, sufrirá una modernización de su imagen que, al final, no será tan agresivo como se esperaba.

Las obras tendrán una duración de un año y medio, aproximadamente, aunque no se acometerá todo el eje de Carretería y Álamos de golpe. La idea del Ayuntamiento de Málaga es que se actúe en seis fases, iniciando los trabajos en la confluencia con Puerta Nueva y el Pasillo de Santa Isabel, y subiendo progresivamente. De esta forma se harán los desvíos y cambios en la circulación necesarios para mantener la accesibilidad al Centro, en especial de los vecinos.

El Observatorio del Medio Ambiente Urbano (OMAU) de Málaga ya ha dado a conocer las líneas básicas del proyecto de remodelación de la calle Carretería. Esta se basa en ampliar las aceras a ambos lados de la calle, con 1,80 metros de ancho de superficie mínima. Eso deja el vial para el tránsito de vehículos en sólo 3 metros de ancho, frente a los 6 metros actuales, y se elimina la mayoría de los aparcamientos, para dejar espacio a las aceras.

Así, la nueva calle Carretería dejará en 27 los aparcamientos para residentes, frente a los 52 actuales; mientras que el estacionamiento para motos se quedarán en menos de la mitad, al pasar de 123 a 43 plazas. La carga y descarga también se reduce en un tercio, aunque el mayor cambio se notará en la calle Álamos, donde sólo se dejará un carril de circulación y aceras, eliminando todo el espacio de estacionamiento para dejar sólo aceras y carril de circulación, desplazando la carga y descarga a Carretería.

La idea es que la calle Carretería se vea favorecida por el procesio de renovación urbana del Centro, enlazando con las calles que ya han sido renovadas, como Dos Aceras, Puerta Nueva, Plaza de San Francisco, Cárcer, Casapalma y plaza de la Merced, entre otras. Así, se apuesta por acercas más anchas, la plantación de 122 árboles a lo largo del eje Carretería-Álamos.

Las aceras se han previsto además siguiendo con las recomendaciones de la ONCE, de forma que sean táctiles para identificar los distintos espacios previstos en la calle. A lo largo de este eje se eliminarán los contenedores en superficie, que se soterrarán y ampliarán en número, pasando de los seis actuales a 20, al tiempo que se instalan 84 bancos y media docena de fuentes. La EMT también ha reordenado la ubicación de las paradas, que mantienen su número, al igual que las plazas de la parada de taxi.

Tribuna de los Pobres

La Tribuna de los Pobres también sufrirá una importante remodelación, aunque no será tan radical como se propuso al principio y se optará por mantener la misma geometría curva que en la actualidad. No obstante, se quitarán los actuales maceteros que hay en la escalinata, dejando una superficie abierta.

Eso sí, la Tribuna de los Pobres se quedará un poco más pequeña, ya que se reservará una parte de la escalinata para construir un ascensor, que mejore la accesibilidad de este espacio.

Dudas vecinales

Los vecinos del Centro Histórico le plantearon al Ayuntamiento de Málaga tres peticiones de cara a este proyecto de remodelación. La primera, según explicó Óscar Agudo, miembro de la asociación de vecinos, es que se incluya un carril-bici en la calle, aunque sea a costa de reducir algo la acera. Óscar Agudo considera que hay espacio suficiente para habilitar este vial reservado, que además permitiría la circulación de los patinetes eléctricos.

Además, mostraron su preocupación por la reducción de los aparcamientos para vecinos, que pasan de 53 a sólo 27, lo que reduce de forma notable la accesibilidad de los habitantes de las calles aledañas. Por último vinculó el apoyo vecinal al proyecto a que se detalle la ocupación de las aceras una vez que se termine la obra, ya que no quieren que se produzcan exceso de ocupaciones con terrazas, como ha ocurrido con proyectos anteriores. Así, los vecinos han solicitado los planos donde se especifiquen las ocupaciones previstas, para asegurarse de que no exceden las actuales.