La Diputación de Málaga ejecuta el 86% de su presupuesto correspondiente al ejercicio de 2018. El presidente de la institución, Francisco Salado, ha comparecido esta mañana acompañado de la vicepresidenta Francisca Caracuel y ha ofrecido el balance de transferencias correspondientes al año pasado, con datos que dibujan una Diputación solvente y al día en el pago a proveedores. Según el equipo de gobierno popular, las transferencias a los municipios de la provincia alcanzaron los 85 millones de euros. Esto supone un 37% del presupuesto total de la institución.

Para Salado, los números ofrecidos hoy muestran un balance que ha calificado de "histórico" y ha sumado a los logros que, según él, estaría logrando el PP al frente de la Diputación. En este contexto, también ha recordado el "hito de lograr la deuda cero". En verano de 2018, la institución saldó su pasivo con los bancos.

Salado ha destacado que la ejecución del presupuesto de 2018 se elevó a casi el 86%, el porcentaje más alto de los últimos 14 años, lo que ha considerado como "el mejor indicador de que se hace una buena gestión de los recursos y del gasto público y de que se cumplen las previsiones iniciales". El gasto reconocido en 2018 fue de 246,5 millones de euros, de los que 24,3 millones de euros se destinaron para liquidar la deuda con los bancos.

Además, se ha referido al esfuerzo inversor realizado por la institución provincial, con un grado de ejecución que alcanzó el 77,2% de las inversiones previstas, 20 puntos más que en 2017.

En total, durante 2018 se invirtieron 59,3 millones de euros, de los que 49,3 millones de euros se destinaron a mejoras de infraestructuras y equipamientos de los municipios. Y otros 10 millones de euros se emplearon en el arreglo de carreteras y en actuaciones en edificios del patrimonio provincial.

Desde 2012, se han ejecutado en la provincia inversiones de la Diputación por valor de 444,3 millones de euros, de los que 377,9 millones se han dedicado directamente a los pueblos. "De esta forma, queda claro que esta institución es la que más invierte en la provincia", ha incidido Salado.

En cuanto a la relación con los proveedores, el periodo medio de pago se situó en 20 días. Durante el año pasado, se atendieron pagos a proveedores por un importe de 50 millones de euros, la cantidad más elevada desde 2012. Y en los últimos siete años los pagos por contratación de obras, suministros o servicios suman 290,5 millones de euros.

Preguntado por el destino de los 33 millones de remanente y por si ya se le ha buscado destino, Salado ha advertido del control del techo de gasto que le impone la ley de estabilidad presupuestaria a las instituciones. En este sentido, ha abogado por más flexibilidad y si no fuera posible en un futuro a corto plazo, el remanente se volvería a destinar a planes concertados con los ayuntamientos.

También salió al paso de las críticas de los grupos de izquierdas de la Diputación sobre descensos en inversiones en la Concertación, asegurando que el PP hace presupuestos «realistas». «Si pones 100 y ejecutas el 60 por ciento y nosotros ponemos 90 y ejecutamos más del 80 por ciento es más cantidad absoluta», ejemplificó.