Desde el día 1 de julio y hasta el próximo 16 de septiembre, la provincia de Málaga cuenta con solo cinco centros de salud abiertos hasta las 20:00 h. de la tarde, su horario habitual durante el resto del año. Estos centros son los de Cruz de Humilladero, Puerta Blanca, El Palo y los consultorios de La Roca y El Cónsul.

El resto de centros de salud de la provincia cerrarán a las 15:00h. En uno de ellos, en el centro de salud Alameda Perchel, trabaja Carmen González Uceda, que afirma que tendrá que acudir al centro de Cruz de Humilladero por las tardes para cubrir las horas de los compañeros que están de vacaciones.

Un año más, los centros de salud de la provincia se enfrentan a esta situación. Y es que la medida de cerrarlos por las tardes en verano fue aprobada por el Gobierno Autonómico en 2012 y lleva en vigor desde entonces. Uceda asegura que cerrar los centros por la tarde supone disminuir la accesibilidad de la población a los servicios sanitarios.

La jornada laboral de un médico de Asistencia Primaria, durante los meses de verano, dista mucho de la del resto del año. En Málaga solo se abren cinco puntos y los profesionales deben repartirse y ampliar su jornada laboral, afirma Carmen, que asegura, además, que esta es una solución forzada que no gusta entre los profesionales sanitarios.

Los meses de verano suponen un mayor volumen de trabajo y una mayor sobrecarga para los profesionales. La agenda de aquellos compañeros que están de vacaciones es volcada en las agendas de aquellos médicos disponibles, lo que acarrea importantes desórdenes. Los pacientes van cambiando de una agenda a otra sin que haya una continuidad por lo que empiezan a encontrarse con problemas sin resolver, algunos de ellos grave, explica Uceda.

Este círculo vicioso termina por dejar sin cita a aquellos pacientes que pertenecen a los médicos que están supliendo las ausencias: «Llega un momento en el que un tercio son tus pacientes y el resto son de otros médicos, por lo que tus propios pacientes se quedan sin cita. Y ocurre que como contigo ya tienen confianza, se presentan en la consulta sin cita para que los atiendas, con lo cual los centros están saturados».

Tiempo insuficiente

Esta saturación lleva consigo un problema del que ya se han hecho eco asociaciones como Basta Ya, el del tiempo por consulta. Las consultas siempre han tenido un horario estándar en el que cada paciente disfrutaba del mismo tiempo de consulta, en España ronda los cinco minutos. Sin embargo, la realidad es bien distinta y este tiempo estipulado no llega a cumplirse. Carmen considera insuficiente este tiempo de consulta para poder atender bien a un paciente, delimitar sus síntomas y establecer una comunicación adecuada.

Los médicos de familia y pediatras reclaman tiempo para realizar bien la actividad que desarrollan. Durante los meses de verano, el nivel de sobrecarga se dispara, trabajan a destajo y con la presión constante de no llegar nunca a todo. Esta situación llegaría incluso a dañar la salud de los profesionales de Atención Primaria en Andalucía, sentencia Carmen, que afirma que la población debe estar cubierta durante todo el año, las 24 horas al día, pero un mismo profesional no puede trabajar 24 horas seguidas.

La solución que se ha buscado para paliar los estragos de esta falta de profesionales ha sido la de incentivar con 142€ diarios a aquellos profesionales que, voluntariamente, cubran las horas, durante las tardes, de aquellos médicos que se encuentran disfrutando de sus vacaciones. Sin embargo, la cifra de voluntarios no es adecuada, ya que la oferta de voluntarios es inferior al cupo de plazas que hay que suplir durante las tardes de verano. Esto supone que los profesionales se vean obligados a cubrir esas tardes, trabajando un mayor número de horas de las que les corresponde y esta es una solución que no gusta, asegura Uceda.

En mitad del revuelo que cada año supone la gestión de los centros de salud durante el verano, Sanidad lanza una oferta MIR con 7.620 plazas, una convocatoria nunca antes vista. No obstante, esta solución tardaría cuatro años en hacerse efectiva, ya que los profesionales que se presenten a esta oferta el próximo 2020 saldrían preparados en el año 2024.

Carmen, asegura que la alternativa está ahí, y es la de atraer a los profesionales que se han ido para desarrollar su profesión fuera de la comunidad autónoma, en el extranjero o en la Sanidad Privada. «Si se sigue formando a profesionales pero no dimensionamos las plantillas, las hacemos fijas y otorgamos el reconocimiento adecuado, se seguirán yendo», sentencia. En este sentido, la solución pasaría por la mejora de las condiciones laborales de los profesionales de Atención Primaria

De momento, las soluciones que se están barajando en otras comunidades autónomas no terminan de convencer a Carmen. La amenaza de las jubilaciones se cierne sobre la comunidad médica del país, y es ante esta previsión de futuro cuando se está proponiendo en comunidades como País Vasco o Navarra la jubilación voluntaria a los 70 años, como medida para suplir la carencia de profesionales. Carmen asegura que esta es una profesión muy dura, que requiere de unas altas capacidades físicas y psíquicas para ser desarrollada: «Es difícil llegar a los 65, que alguien llegue a los 70 es anecdótico».