La Gerencia Municipal de Urbanismo ha remitido a la Consejería de Fomento, Infraestructuras y Ordenación del Territorio de la Junta el proyecto para desdoblar la carretera A-7054, en concreto dos kilómetros, es decir, el tramo que va desde la rotonda que conecta Intelhorce y la Azucarera con la glorieta del polígono de Trévenez. Tanto el Ayuntamiento como el Ejecutivo andaluz están consensuando el proyecto para ejecutarlo, lo que corresponde, junto a su financiación, a la Administración autonómica, aunque la petición parte del Consistorio malagueño, que ha establecido así una serie de prioridades (en este y otros proyectos). Hay diálogo y buenas intenciones por parte de la Administración regional y la iniciativa, por tanto, está en una fase muy avanzada de estudio.

Esta actuación permitirá mejorar la conexión de la zona con los polígonos Guadalhorce y Trévenez, la barriada del Tarajal y futuros desarrollos que habrá en esa gran área, como, por ejemplo, la nueva nave de Mayoral en Intelhorce, que se convertirá en un gran centro logístico y que, por tanto, también se beneficiará de esta mejora en la conexión, tal y como explicó ayer a este periódico el concejal de Ordenación del Territorio de Málaga, Raúl López.

Los vecinos del Tarajal, de hecho, serán los más beneficiados por esta actuación, que además incluye una mejora «ambiciosa en el acerado». Se trata de dotar de aceras una amplia zona. En este sentido, el desdoblamiento de la carretera era una reivindicación histórica de estos residentes y del Ayuntamiento a la Junta, que es la titular de la carretera y la que debe ejecutarla y sufragar su desdoblamiento (el proyecto supera los 10 millones de euros). «Hay buena sintonía. Ya les hemos enviado el proyecto. Va a mejorar mucho la calidad de la accesibilidad en la barriada», explica López.

Ahora, se estaría perfilando con los técnicos de la Junta cuál será el proyecto definitivo (el enviado es una primera aproximación), es decir, se está consensuando la actuación final que luego concretará la Administración autonómica.

«Es muy beneficiosa la actuación, por esa zona pasan muchos camiones, y, además de ampliar la vía -hay un carril por sentido-, vamos a ejecutar el acerado del Tarajal, y desde luego la mejora en la conectividad va a ser importante». En concreto, por este tramo pasan cada día más de 20.000 coches. Esta actuación se recogió en el programa del PP y, en líneas generales, la transformación consistiría (según ese documento) en establecer dos calzadas centrales de siete metros (con dos carriles cada una), separadas por una mediana; dos vías de servicio de seis metros y dos carriles; aceras y carriles bici.