El juez decano de Málaga, José María Páez, ha expresado esta tarde, en declaraciones a La Opinión de Málaga, su preocupación y la de sus compañeros de la judicatura malagueña por lo que, según ha dicho, considera "un abandono del servicio de guardia" por parte de los abogados malagueños, una postura que podría tener "consecuencias legales".

Páez ha indicado que los abogados "no están acudiendo ni a los centros de detención ni al juzgado, y las videoconferencias, por otro lado, son inviables". "No cogen el teléfono. En el juzgado de guardia estamos todos, las limpiadoras, los detenidos, los jueces y el fiscal. Los detenidos no tienen asistencia letrada. No están funcionando las videoconferencias, hay una para toda la provincia y estamos, sinceramente, muy preocupados por la situación que han creado los abogados", ha dicho.

El juez decano ha declarado que se trata de un derecho constitucional de los detenidos y la obligación "es de los abogados".

De cualquier forma, el pasado martes el Colegio de Abogados emitió una nota en la que aseguraba, tras haberlos suspendido el día anterior, que se comenzó a restablecer los servicios de guardias en la provincia en aquellos juzgados y centros de detención donde se han habilitado las medidas necesarias para garantizar la seguridad de los letrados. En el caso de la capital, los abogados están prestando desde el martes, según la institución colegial, las asistencias a través de videoconferencias realizadas en el Paseo de la Farola en conexión con la Ciudad de la Justicia, donde han cerrado su sede.

El decano de los abogados malagueños, Francisco Javier Lara, ha negado que hayan abandonando el servicio de guardia y ha asegurado que se ha llegado a un acuerdo tanto con el decano como con la presidenta de la Audiencia Provincial, Lourdes García Ortiz, para hacer las asistencias por videoconferencia desde el Paseo de la Farola. Todo está centralizado a través de una de las responsables del colegio, que "tiene un teléfono abierto las 24 horas". "Está atendiendo a todas las llamadas y tenemos grupos de WhatsApp con las listas de los abogados de guardia de cada día". Páez, por su parte, ha asegurado que no hay acuerdo alguno, porque él no puede llegar a un pacto general invadiendo las competencias de los jueces de Instrucción, que deciden en cada caso de forma soberana. «No queremos polemizar, sólo queremos que los abogados asistan a los detenidos y se solucione esto», dijo.

Lo sucedido hoy, ha señalado, es que la juez de Instrucción 12, en funciones de guardia, ha llamado al Colegio de Abogados a las 10.24 horas "para que se persone un letrado de guardia antes de las 12.00 horas indicando expresamente que, si antes de esa hora no acudía el abogado de oficio, actuarían en consecuencia y que tomaban nota de haberle avisado. Indicando también que no admitirían la videconferencia porque no se iban a desplazar a una sala a realizarla", consta en una diligencia de instrucción del Colegio de Abogados.

En respuesta a ese requerimiento, se remite oficio del decano a Instrucción 12 a través de un correo electrónico, a las 11.43 horas, con copia a la presidenta de la Audiencia, el juez decano y el TSJA, "solicitando al juzgado que indicara la hora en que el letrado de guardia debía estar en dependencis colegiales para establecer la conexión para proveer de inmediato la prestación del servicio sin dilación". A las doce y media en punto, explican en la diligencia, "sin aviso previo y sin contestar al oficio del Colegio sobre la hora en la que se conectaría, se conecta automáticamente por el sistema de videoconferencia, y dado que no se encontraba aún el abogado de oficio en la sede, exigió (la juez) hablar con un responsable del Colegio".

Acudió el secretario general técnico y habló con la magistrada, explicándole que se había avisado al abogado y que este venía de camino. "Ante ello, la magistrada y el Letrado de la Administración de Justicia manifiestan su desaprobación y enfado, indicando que llevaban esperando desde las 10 y había transcurrido demasiado tiempo". Asimismo, dijeron que levantarían acta y pidieron al secretario que se identificase.

El secretario general técnico avisó al decano, quien manifestó que el juez decano se había puesto e contacto con él a las 12.34 horas para preguntarle qué problema había, "a lo que el decano le contesta que el único problema era que el juzgado se había negado en principio a realizarla mediante videoconferencia, y que, en cuanto fuera admitida la misma, se llamaría al letrado para prestar asistencia". La letrada de oficio, según la diligencia, se presentó en el Colegio a las 12.50 horas, y llamó insistentemente al juzgado para hacer la videoconferencia. "Tras varios intentos, se contacta con el juzgado e informan al responsable de que han dejado al detenido en libertad porque no se ha presentado el abogado y que adoptarán las medidas oportunas".

.