El Obispado de Málaga ha actualizado las normas para el culto público tras la publicación de las nuevas medidas restrictivas de la Junta para tratar de contener la transmisión del Covid-19 y que entran en vigor en la medianoche de este martes. La diócesis informa de que las misas vespertinas podrán mantener sus horarios habituales, aunque se celebren después de las 18.00 horas, horario máximo para la práctica de actividades considaras no esenciales. Eso sí, el aforo del templo tendrá que limitarse, según el nivel de alerta de cada población.
Las iglesias tendrán que reducir su capacidad para acoger fieles al 50% (niveles 2 y 3) o al 30% (nivel 4), dependiendo de la incidencia de los contagios. Y eso sí, tendrá que cerrar, como muy tarde, a las 21.30 horas, para facilitar que los feligreses puedan regresar a sus casa y cumplir con el denominado toque de queda.
El Obispado, en todo caso, pide precaución en todas las actividades que se realicen y que se lleven a cabo siguiendo todas las medidas higiénico y sanitarias previstas.
Según la diócesis, al desarrollar la excepción a la limitación horaria de las 18.00 horas "no se hace referencia alguna a los lugares de culto". "Esto es obvio al no tratarse la libertad religiosa de un “servicio o establecimiento”.
Los sacerdotes que por encargo pastoral deban realizar desplazamientos intermunicipales, dada la restricción de entradas y salidas de todos los municipios, deben ponerse en contacto con la Secretaría General a fin de que pueda emitir el correspondiente certificado en función de la encomienda pastoral.
