El Málaga CF y el Cardiff City ya han acordado las condiciones de la cesión de Javi Guerra al conjunto blanquiazul hasta el final de temporada, pero flecos por los requisitos a la hora de tributar la ficha del delantero -es diferente en el Reino Unido que en España- impidieron ayer que se hiciera oficial la operación.

No obstante, todo está listo para que el malagueño firme con el equipo de su tierra y se encuentra en la ciudad galesa esperando a que se dé luz verde a su cesión, tomar un avión rumbo a Málaga, pasar el pertinente reconocimiento médico y ponerse a las órdenes de Gracia sin tiempo que perder.

Una situación que, debido a lo avanzado de las negociaciones, no debería demorarse más allá de esta semana. Así las cosas, una vez que el conjunto blanquiazul regrese de Valencia tras su partido copero contra el Levante podrían precipitarse los acontecimientos.

Y es que el interés del club y el jugador por agilizar la cesión es máxima y el traspaso de documentos entre clubes es más que fluida en las últimas horas.

Javi Guerra, que lleva desde finales del mes de septiembre sin jugar con el Cardiff, no quiere perder más tiempo y necesita comenzar a trabajar con el Málaga desde ya para completar su puesta apunto.

Pero no sólo está candente el capítulo de llegadas en la entidad de Martiricos. En cuanto a las salidas, el siguiente que hará las maletas tras Pablo Pérez y Roque Santa Cruz será Francisco Portillo, cuya cesión al Real Betis ya está también apalabrada. De hecho, el propio presidente del equipo verdiblanco, Carlos Ollero, confirmó las negociaciones entre clubes por el centrocampista paleño.

«Estamos trabajando y espero que se pueda cerrar la operación lo antes posible, pero no tenemos prisa. Los problemas son los lógicos que hay cuando quieres fichar a un jugador de esa calidad, aunque lleve un año casi sin jugar. También parece que su club no tiene mucha prisa», comentó el dirigente en la cadena Cope.

«El Betis no se ha marcado ningún plazo. Estamos razonablemente tranquilos porque el equipo gana, tiene alternativas y aún queda mercado de invierno», prosiguió Ollero.

Lo cierto es que el conjunto hispalense es el que más ha apostado por el canterano, casi descartado por Javi Gracia. Pepe Mel, entrenador bético, ya ha hablado con él en varias ocasiones y le ha manifestado su interés en que sea uno de los buques insignia en el asalto a Primera División.

Con la salida de Portillo, el Málaga no cerraría el capítulo de salidas y en las oficinas de La Rosaleda aún aguardan a Jorge Berlanga, representante del portero Guillermo Ochoa, para una reunión en la que se decida el futuro del mexicano, a disgusto en el club por la falta de minutos.

En este sentido, la postura del Málaga es clara, escucharán ofertas por el portero internacional y si es beneficiosa para ambas partes aceptarán su salida. Caber recordar que Ochoa llegó libre al Málaga, por lo que recibir una buena cantidad por él en un supuesto traspaso plantearía una gran operación para la entidad de Martiricos.