Se acumula el trabajo en las oficinas de Martiricos. Después de un verano marcado por la incertidumbre y la dilatación en un sinfín de operaciones, tanto de entrada como de salida, el Málaga CF encara la recta final de este mercado estival de fichajes con muchos deberes que hacer. El equipo de José Luis Pérez Caminero, con el visto bueno definitivo de Al-Thani, cuentan con escasos siete días para concluir los movimientos pertinentes que permitan a Víctor Sánchez del Amo confeccionar una plantilla de garantías para afrontar esta campaña 2019/20 de LaLiga SmartBank.

Pero antes de traer nuevos efectivos, los dirigentes blanquiazules deberían concretar varias transacciones de la «operación salida». El conjunto costasoleño aún tiene el toque de atención de LaLiga con respecto al límite salarial que impide que varios jugadores todavía no puedan disputar partidos oficiales.

Uno de los jugadores que en los últimos días han abandonado la disciplina malaguista ha sido Alfred N’Diaye. Pretendido por el Getafe, el senegalés también tiene sobre la mesa una suculenta oferta en Arabia Saudí que provocaría un cambio en sus planes. En el club madrileño no hacen declaraciones al respecto. De hecho, Bordalás fue preguntado por el centrocampista después del choque liguero ante el Athletic y alegó no saber nada al respecto. «Eso se lo tenéis que preguntar a nuestro director deportivo, yo no estoy al corriente. A partir de mañana sabremos noticias», relató el técnico azulón. Arabia Saudí sería la mejor opción para el Málaga, que se ahorraría directamente los seis millones imposibles de asumir de la opción a compra tras el segundo año de cesión.

Otro caso abierto, y que parece que va para largo, es la resolución del traspaso de Jony Rodríguez al Lazio italiano. El jeque, no satisfecho con la supuesta marcha unilateral por parte del futbolista asturiano, está inmerso en procesos judiciales para esclarecer la vinculación del futbolista con el conjunto blanquiazul y su posterior marcha a la Serie A.

El Málaga tendrá, además, que dar salida en estos días a los jugadores con los que no cuenta, ya sean por motivos deportivos o por no poder asumir sus fichas.

Todos estos movimientos, las bajas, son de vital importancia para cuadrar cuentas y, a partir de ahí, seguir construyendo un equipo para Víctor Sánchez del Amo. LaLiga, con la restricción en las inscripciones, ya avisó al Málaga de que debe aligerar su masa salarial para poder competir regularmente esta temporada.

Este será uno de los últimos problemas con el que lidiará la entidad de Martiricos. Ni Okazaki, ni José Rodríguez han podido ser inscritos y, por lo tanto, no han disputado aún ningún partido oficial. Misma tesitura en la que se encuentran Mula e Ivan que, por edad, deben tener ficha profesional y no alargar más su condición de jugadores del filial.

Refuerzos para Víctor

Una vez perfiladas las salidas, la dirección deportiva de Caminero, con el beneplácito del jeque Al-Thani, tiene varios sectores del terreno de juego que reforzar. Empezando por portería, el equipo blanquiazul solo cuenta a día de hoy con un guardameta profesional, el marroquí Munir. La posición la completan los canteranos Kellyan y Gonzalo, hecho que no contentaría del todo al técnico malaguista. En plantilla sigue Cenk Gönen, pero Víctor Sánchez del Amo reveló en la rueda de prensa previa al choque con Las Palmas que su rol no es principal.

De la misma manera, la posición más evidente a completar es la delantera. Hasta la fecha, el Málaga CF no cuenta con ningún «9» y la falta de gol ya se ha hecho patente en las dos primeras jornadas ligueras. El tiempo corre en contra de la dirección deportiva blanquiazul que, tras sondear varios nombres a lo largo de todo el verano, esta última semana deberá pescar entre lo que quede disponible.

Con la medular bien formada, la última línea a reforzar sería la defensa. Por ello, Caminero también estaría en la búsqueda de un central zurdo y un lateral izquierdo con el que poder realizar rotaciones.