La operación que la Guardia Civil inició ayer contra una banda de moteros asentada en Marbella arroja nuevos datos. Según ha podido saber este periódico, se trata de un golpe contra la sección de los Ángeles del Infierno de la Costa del Sol que sólo durante la jornada del miércoles sumó al menos ocho registros (siete domicilios y una nave) y otras tantas detenciones por presuntos delitos contra la salud pública y tenencia ilícita de armas. Fuentes cercanas al caso aseguran que los investigadores han intervenido estupefacientes, fundamentalmente marihuana, y armas, entre ellas una escopeta sustraída y un revólver. Además, los agentes han inmovilizado 20.000 euros en efectivo y abundante parafernalia e indumentaria propia de la banda.

La investigación, que sigue abierta y podría sumar nuevas detenciones, está siendo llevada a cabo por agentes del Servicio de Información de la Guardia Civil de Madrid, Sevilla y Málaga bajo la supervisión del Juzgado de Instrucción número 2 de la capital.

No es la primera vez que se realiza en la Costa del Sol una operación relacionada con bandas de moteros. El pasado año, la Guardia Civil detuvo al jefe de una importante organización de narcotráfico buscado por la justicia belga por supuestamente organizar el traslado de 155 kilos de cocaína desde Ecuador y suministrar cocaína a un grupo de la organización motera Ángeles del Infierno de Brujas. En 2009, una persona fue detenida en Fuengirola tras el registro de la sede social de la banda de motoristas Los Ángeles del Infierno, en una operación nacional que acabó con más de una veintena de arrestados.